Skip to main content
Newsletter Info

CESE info

European Economic and Social Committee A bridge between Europe and organised civil society

APRIL 2025 | ES

GENERATE NEWSLETTER PDF

Lenguas disponibles:

  • BG
  • CS
  • DA
  • DE
  • EL
  • EN
  • ES
  • ET
  • FI
  • FR
  • GA
  • HR
  • HU
  • IT
  • LT
  • LV
  • MT
  • NL
  • PL
  • PT
  • RO
  • SK
  • SL
  • SV
Editorial

Editorial

La sociedad civil aborda la polarización social

Es abril, y seguimos reflexionando sobre las estimulantes ideas surgidas a raíz de nuestros actos emblemáticos de marzo, que, una vez más, demostraron el poder y la determinación de la sociedad civil.

La sociedad civil aborda la polarización social

Es abril, y seguimos reflexionando sobre las estimulantes ideas surgidas a raíz de nuestros actos emblemáticos de marzo, que, una vez más, demostraron el poder y la determinación de la sociedad civil.

Marzo ha sido, en efecto, un mes intenso e inspirador para el Comité Económico y Social Europeo. Organizamos nuestro acto anual dedicado a la juventud, ¡Tu Europa, tu...Leer

La sociedad civil aborda la polarización social

Es abril, y seguimos reflexionando sobre las estimulantes ideas surgidas a raíz de nuestros actos emblemáticos de marzo, que, una vez más, demostraron el poder y la determinación de la sociedad civil.

Marzo ha sido, en efecto, un mes intenso e inspirador para el Comité Económico y Social Europeo. Organizamos nuestro acto anual dedicado a la juventud, ¡Tu Europa, tu voz!, en el que damos la voz al futuro de Europa: los jóvenes —muchos de ellos aún en la escuela secundaria— de todo el continente, incluido el Reino Unido y los países candidatos a la UE.

También celebramos nuestra segunda edición de la Semana de la Sociedad Civil, que reunió a más de ochocientos representantes de la sociedad civil de toda Europa para que participaran en animados debates, intercambiaran buenas prácticas y crearan juntos soluciones destinadas a reforzar la participación democrática. Este año el tema elegido fue «El refuerzo de la cohesión y la participación en las sociedades polarizadas».

En los turbulentos tiempos actuales, en los que no faltan problemas acuciantes, ¿por qué centrarse en la polarización?

La polarización —el recrudecimiento del antagonismo entre los puntos de vista— puede ser una parte normal del discurso democrático que encuentra a menudo su origen en la ideología. De hecho, la existencia de un vivo debate y la expresión de opiniones diversas, incluso enfrentadas, son vitales para cualquier sociedad abierta y pluralista como la nuestra. Como ha subrayado a menudo el CESE, un debate abierto y sin restricciones es «la base de una sociedad participativa, sin la cual la democracia no puede funcionar correctamente».

Sin embargo, el tipo de polarización que vemos hoy es diferente. Asistimos al auge de una polarización negativa y un populismo que rechazan el diálogo, erosionan la confianza y socavan los valores democráticos. En la política y la vida pública, el espacio para llegar a acuerdos se está reduciendo. Cuando la polarización se vuelve hostil —alimentando el odio o el resentimiento—-, perturba la cohesión social, alimenta la división y, en el peor de los casos, desemboca en la violencia.

Al dedicar nuestro acto a la polarización, queríamos llamar la atención sobre el preocupante aumento de sus aspectos tóxicos, que se están infiltrando poco a poco por todos los poros de las sociedades europeas.

Esta preocupante tendencia se ve agravada por una serie de amenazas: la injerencia extranjera en los procesos democráticos, la difusión de desinformación y la manipulación de las redes sociales para acallar las voces contrarias y promover opiniones extremas. También observamos crecientes presiones sobre la libertad de los medios de comunicación —ya sea a través de su monopolización, la injerencia de los gobiernos o los ataques a periodistas—, en un momento en el que contar con medios libres y pluralistas resulta más esencial que nunca.

En el CESE nos preocupa profundamente el aumento de los delitos motivados por el odio en toda Europa, incluidos los de índole religiosa, sexual o de género. El odio socava la democracia, debilita nuestras instituciones y siembra la desconfianza en la ciudadanía.

Es aquí donde la sociedad civil desempeña un papel crucial. Las organizaciones de la sociedad civil cuentan con el empuje y el coraje necesarios para defender los espacios democráticos, defender los derechos fundamentales y fortalecer el tejido de nuestras comunidades. Esto incluye luchar contra los efectos tóxicos de la polarización negativa.

La Semana de la Sociedad Civil ha sido nuestra manera de apoyar ese esfuerzo, ofreciendo un espacio para un diálogo significativo, nuevas ideas y la resolución colaborativa de problemas con el fin de fomentar la participación y la cohesión social. Organizamos una serie de paneles del Grupo de Enlace sobre diferentes temas, y dedicamos un día a la iniciativa ciudadana europea (ICE), la herramienta más avanzada de la UE para la democracia directa.

En el marco de esta semana, el CESE también concedió su 15.º Premio Sociedad Civil a tres excelentes iniciativas que luchan contra la polarización en toda Europa. Estos proyectos, seleccionados entre más de cincuenta candidaturas procedentes de quince Estados miembros, muestran tanto la magnitud del reto como el profundo compromiso de los agentes de la sociedad civil por afrontarlo sin rodeos.

Espero que la Semana de la Sociedad Civil de este año y nuestros galardonados insuflen un renovado optimismo y confianza en el papel que puede desempeñar la sociedad civil en la defensa y promoción de los valores democráticos europeos.

Y mientras seguimos repasando las ideas, propuestas y conclusiones de nuestros actos de marzo, en este número de abril hemos decidido ceder la palabra a algunas de las voces de la Semana de la Sociedad Civil y ¡Tu Europa, tu voz!. Espero que disfruten de la lectura.

Laurenţiu Plosceanu

Vicepresidente de Comunicación

Ocultar
Para su agenda

8 de mayo de 2025

Acto sobre el empoderamiento de los migrantes vulnerables

10 de mayo de 2025

Día de Europa 2025

22 de mayo de 2025

Conferencia «La ciudadanía puede vencer la desinformación» en Lisboa (Portugal)

11 de junio de 2025

Conferencia «Garantizar la energía asequible en Europa»

18 y 19 de junio de 2025

Pleno del CESE

Una pregunta para...

La fragmentación del mercado único está repercutiendo directamente en el coste de la vida en la UE y empuja a muchas personas al borde de la pobreza. Hemos preguntado a Emilie Prouzet, ponente del Dictamen sobre este tema, qué recomienda el CESE para abordar esta cuestión y crear un mercado único justo y competitivo. 

La fragmentación del mercado único está repercutiendo directamente en el coste de la vida en la UE y empuja a muchas personas al borde de la pobreza. Hemos preguntado a Emilie Prouzet, ponente del Dictamen sobre este tema, qué recomienda el CESE para abordar esta cuest...Leer

La fragmentación del mercado único está repercutiendo directamente en el coste de la vida en la UE y empuja a muchas personas al borde de la pobreza. Hemos preguntado a Emilie Prouzet, ponente del Dictamen sobre este tema, qué recomienda el CESE para abordar esta cuestión y crear un mercado único justo y competitivo. 

Ocultar

El precio de un mercado único fragmentado es demasiado alto

Por Emilie Prouzet

Las disfunciones del mercado único tienen un impacto directo en el coste de la vida y el CESE lamenta que la situación se esté degradando. El coste de la vida es más que nunca la principal preocupación de nuestros conciudadanos y sobre todo de las personas jóvenes. Los más afectados son los 94,6 millones de europeos que viven en riesgo de pobreza o exclusión social.

Por Emilie Prouzet

Las disfunciones del mercado único tienen un impacto directo en el coste de la vida y el CESE lamenta que la situación se esté degradando. El coste de la vida es más que nunca la principal preocupación de nuestros conciudadanos y sobre todo de las personas jóvenes. Los más afectados son los 94,6 millones de europeos que viven en riesgo de pobreza o exclusión social.

Según es...Leer

Por Emilie Prouzet

Las disfunciones del mercado único tienen un impacto directo en el coste de la vida y el CESE lamenta que la situación se esté degradando. El coste de la vida es más que nunca la principal preocupación de nuestros conciudadanos y sobre todo de las personas jóvenes. Los más afectados son los 94,6 millones de europeos que viven en riesgo de pobreza o exclusión social.

Según estimaciones del FMI, las barreras no arancelarias dentro de la UE equivalen a derechos de aduana de aproximadamente un 44 % para las mercancías, es decir, tres veces más que las barreras entre los Estados de EE.UU, por citar un ejemplo comparativo que ya se ha convertido en habitual. Para el mercado de servicios, el porcentaje se eleva al 110 %.

Hay muchos sectores, como la alimentación, la vivienda, la energía, la asistencia sanitaria o la educación, que se ven afectados y para los cuales existen iniciativas europeas. Todos tenemos que dar un paso al frente: los Estados miembros, los operadores privados y la Comisión Europea en su papel de guardiana de los Tratados. Quisiera mencionar tres de las recomendaciones clave formuladas en el Dictamen.

En primer lugar, urge abordar las restricciones territoriales de suministro y la segmentación nacional por parte de los operadores privados, que limitan la competencia y se traducen en precios más elevados para los consumidores. Según un estudio realizado en 2020 por el JRC, estas restricciones suponen para los consumidores un coste adicional de 14 000 millones de dólares al año. Si se tiene en cuenta la inflación, es lógico que el principal objetivo ahora sea mejorar el mercado interior. La Comisión está trabajando en ello, principalmente a través del Grupo de Trabajo para el Cumplimiento de la Legislación sobre el Mercado Único. Se han presentado propuestas pese a la complejidad del problema. Es preciso evaluar su impacto y avanzar rápidamente en este ámbito.

Asimismo, proponemos acelerar los procedimientos contra las normas nacionales que infringen el Derecho de la UE. Habría que estudiar la posibilidad de adoptar medidas cautelares contra infracciones manifiestas de las normas de la UE. No debemos permitir que se levanten barreras. El proteccionismo de algunos Estados miembros tiene consecuencias directas. ¿Y qué decir de la posibilidad de que los medicamentos caduquen antes de que puedan ser redirigidos allí donde más se necesitan?

Por último, es nuestro deber hallar un planteamiento equilibrado entre prevenir la erosión de unas normas estrictas en materia de sostenibilidad, bienestar y protección de los trabajadores y reducir las cargas administrativas innecesarias y facilitar el comercio transfronterizo para promover un mercado interior justo y competitivo.

Ocultar

AL GRANO

Elena Calistru, miembro del CESE y ponente del Dictamen «Dejar atrás las crisis: medidas en pos de una economía europea resiliente, cohesionada e inclusiva», escribe sobre los imperativos económicos que justifican la creación de una economía que proteja a las personas y las empresas de las turbulencias económicas y las crisis agudas del coste de la vida.

Elena Calistru, miembro del CESE y ponente del Dictamen «Dejar atrás las crisis: medidas en pos de una economía europea resiliente, cohesionada e inclusiva», escribe sobre los imperativos económicos que justifican la creación de una economía que pr...Leer

Elena Calistru, miembro del CESE y ponente del Dictamen «Dejar atrás las crisis: medidas en pos de una economía europea resiliente, cohesionada e inclusiva», escribe sobre los imperativos económicos que justifican la creación de una economía que proteja a las personas y las empresas de las turbulencias económicas y las crisis agudas del coste de la vida.

Ocultar

Resiliencia económica: de la gestión de crisis a la protección de los ciudadanos

Por Elena Calistru

Las crisis recientes han sometido la arquitectura económica de Europa a una prueba de resiliencia, cuya carga ha recaído sobre todo en los ciudadanos de a pie. Nuestro Dictamen Dejar atrás las crisis ofrece un plan rector para una economía que proteja a las personas y las empresas, en lugar de exponerlas a turbulencias económicas.

Por Elena Calistru

Las crisis recientes han sometido la arquitectura económica de Europa a una prueba de resiliencia, cuya carga ha recaído sobre todo en los ciudadanos de a pie. Nuestro Dictamen Dejar atrás las crisis ofrece un plan rector para una economía que proteja a las personas y las empresas, en lugar de exponerlas a turbulencias económicas.

Tres son los imperativos económicos que priman:

En ...Leer

Por Elena Calistru

Las crisis recientes han sometido la arquitectura económica de Europa a una prueba de resiliencia, cuya carga ha recaído sobre todo en los ciudadanos de a pie. Nuestro Dictamen Dejar atrás las crisis ofrece un plan rector para una economía que proteja a las personas y las empresas, en lugar de exponerlas a turbulencias económicas.

Tres son los imperativos económicos que priman:

En primer lugar, las previsiones económicas deben dejar de ser análisis retrospectivos para convertirse en intervenciones predictivas. La inflación hace mella antes en los comedores que en los cuadros de indicadores económicos. Necesitamos sistemas sofisticados de detección precoz de los cuellos de botella en el suministro y de las anomalías en la transmisión de los precios, antes de que estos problemas se materialicen en facturas de calefacción y de alimentación inasumibles. Los hogares más vulnerables a las perturbaciones económicas son precisamente aquellos con la menor capacidad para absorberlas, una realidad que exige una cartografía detallada de la vulnerabilidad para garantizar una protección bien orientada.

En segundo lugar, el planteamiento estructural de la capacidad presupuestaria debe dotarse de un carácter estabilizador, en vez de limitarse a una mera respuesta a las emergencias. NextGenerationEU fue un instrumento admirable, pero abocado a la improvisación. Mediante mecanismos permanentes de estabilización presupuestaria supervisados por la sociedad civil se garantizaría que las respuestas a las crisis protejan a las personas más expuestas. Una gobernanza económica que pase por alto los efectos distributivos genera tensiones sociales que socavan la propia resiliencia que procuramos fortalecer. Las condicionalidades sociales de la financiación de la UE no deben percibirse como trabas burocráticas, ya que podrían garantizar un crecimiento económico que se traduzca en un mejor nivel de vida para todos.

En tercer lugar, es necesario acelerar la integración de los mercados donde más interese a los consumidores. Los costes de la energía, que superan con creces los de los competidores, no solo constituyen indicadores macroeconómicos, sino que también representan facturas mensuales que asfixian los presupuestos familiares en toda Europa. Las inversiones estratégicas en infraestructuras transfronterizas y en la integración de los mercados de la energía no solo son objetivos económicos abstractos, sino que también suponen un verdadero alivio para las familias y empresas que afrontan presiones en relación con el coste de la vida.

Una política económica diseñada sin aportaciones de la sociedad civil equivale a conducir a ciegas, algo técnicamente posible pero insensato en la práctica. Diseñar las políticas con la plena participación de quienes sufrirán sus efectos es una práctica que en cualquier caso arrojará resultados sobresalientes. No se trata de realizar una consulta para cumplir una formalidad, sino de aprovechar a lo largo de todo el ciclo político la inteligencia colectiva de la sociedad civil organizada.

Hay que modernizar, no abandonar, la economía social de mercado competitiva de Europa. Solo aquellos con una escasa visión económica reducen la cuestión a elegir entre la competitividad o la protección de los ciudadanos. Es preciso contar con una creatividad institucional que sitúe la resiliencia económica y el bienestar de las personas en el centro de la gobernanza económica de Europa para abordar los retos del futuro.

Ocultar

EL INVITADO SORPRESA

Tras la traición de Estados Unidos, ha quedado meridianamente claro que Europa va a tener que elegir entre defender hoy a Ucrania con el mismo ahínco con que se defendería a sí misma o afrontar mañana en su propio territorio al ejército ruso. Será una ardua lucha, pero ninguna batalla debe darse por perdida antes de librarla. Queda por ver cuántos europeos lucharán a nuestro lado, afirma nuestra invitada sorpresa, la periodista ucraniana Tetyana Ogarkova.

Tras la traición de Estados Unidos, ha quedado meridianamente claro que Europa va a tener que elegir entre defender hoy a Ucrania con el mismo ahínco con que se defendería a sí misma o afrontar mañana en su propio territorio al ejército ruso. Será una ardua lucha, pero ninguna batalla debe darse por perdida antes de librarla. Queda por ver cuántos europeos lucharán a nuestro lado, afirma nuestra invitada sorpresa, la ...Leer

Tras la traición de Estados Unidos, ha quedado meridianamente claro que Europa va a tener que elegir entre defender hoy a Ucrania con el mismo ahínco con que se defendería a sí misma o afrontar mañana en su propio territorio al ejército ruso. Será una ardua lucha, pero ninguna batalla debe darse por perdida antes de librarla. Queda por ver cuántos europeos lucharán a nuestro lado, afirma nuestra invitada sorpresa, la periodista ucraniana Tetyana Ogarkova.

Tetyana Ogarkova es una periodista ucraniana, ensayista y especialista en literatura, que reside en Kiev. Es coordinadora del departamento internacional del Ukraine Crisis Media Center y copresentadora del podcast Explaining Ukraine. También es profesora ayudante de la Universidad Mohyla de Kiev y doctora en Letras por la Université Paris-XII Val-de-Marne. 

Ocultar

LA EUROPA DE LA DEFENSA, UNA CARRERA CONTRA RELOJ

Por Tetyana Ogarkova

A principios del pasado mes de marzo emprendí un viaje de dos días a Francia desde Kiev con el corazón en un puño. Asistía a un simposio sobre Ucrania, lo que me impidió acudir a una importante ceremonia en la plaza de la Independencia, en el centro de la ciudad, donde mi amiga, la poetisa Svitlana Povalyaeva, daría un último adiós a su primogénito, Vasyl, asesinado en el frente a la edad de 28 años. Roman, el menor de sus hijos, había perecido luchando en la batalla por liberar la región de Járkiv en el verano de 2022, con tan solo 24 años. 

Por Tetyana Ogarkova

A principios del pasado mes de marzo emprendí un viaje de dos días a Francia desde Kiev con el corazón en un puño. Asistía a un simposio sobre Ucrania, lo que me impidió acudir a una importante ceremonia en la plaza de la Independencia, en el centro de la ciudad, donde mi amiga, la poetisa Svitlana Povalyaeva, daría un último adiós a su primogénito, Vasyl, asesinado en el frente a...Leer

Por Tetyana Ogarkova

A principios del pasado mes de marzo emprendí un viaje de dos días a Francia desde Kiev con el corazón en un puño. Asistía a un simposio sobre Ucrania, lo que me impidió acudir a una importante ceremonia en la plaza de la Independencia, en el centro de la ciudad, donde mi amiga, la poetisa Svitlana Povalyaeva, daría un último adiós a su primogénito, Vasyl, asesinado en el frente a la edad de 28 años. Roman, el menor de sus hijos, había perecido luchando en la batalla por liberar la región de Járkiv en el verano de 2022, con tan solo 24 años.

Subí al tren con un nudo en el estómago: había dejado en casa a mis tres hijas. No era la primera ocasión que partía al extranjero durante la guerra por un breve lapso, pero esta vez estaba aterrorizada.

Era consciente de que, en caso de peligro inminente por misiles balísticos rusos, el sistema de alerta de mi teléfono podría no emitir una luz roja que advirtiera de tal peligro. Durante unos días estaría a 2 000 kilómetros de casa, sin tener ni idea de si mis hijas estarían a salvo, y me resultaba insoportable.

Tal fallo en el sistema de alerta se debería a que los Estados Unidos habrían interrumpido el suministro de inteligencia a Ucrania, incluso para la detección temprana de misiles balísticos lanzados desde territorio ruso. Ya habían suspendido la ayuda militar, hasta el punto de bloquear en Polonia equipos que ellos mismos habían enviado.

Unos días después, regresé a Ucrania. Entretanto, habían tenido lugar los diálogos entre las delegaciones ucraniana, estadounidense y saudí: Ucrania estaba dispuesta a aceptar un alto el fuego total e inmediato si Rusia también hacía lo propio. Donald Trump manifestó su satisfacción con el resultado, reinstaurando el flujo de datos de inteligencia, junto con el apoyo militar acordado durante el Gobierno de Biden.

No obstante, había hecho trizas toda nuestra confianza: tras la traición, es difícil fingir que no sangra el corazón.

¿No se siente Europa también traicionada? La era del paraguas de seguridad de la OTAN bajo el liderazgo estadounidense ha llegado a su fin. La turba de trumpistas marca distancias: el presidente tiene previsto reducir la presencia de su nación con fines militares y humanitarios en Europa y está sacando a Rusia, al agresor, de su aislamiento diplomático y económico.

Si Trump quiere un alto el fuego en Ucrania lo antes posible y de cualquier manera, es porque no considera que la difícil situación de Ucrania importe demasiado; simplemente aspira a minimizar los costes para el presupuesto nacional. Estados Unidos ya no participa en reuniones como las que se convocan en la base de Ramstein ni prevé prestar ningún otro tipo de asistencia militar durante este año.

Una paz a costa de la derrota de Ucrania no es algo que le quite el sueño al Gobierno estadounidense. En efecto, los enviados Steve Witkoff y Keith Kellogg han propuesto dividir Ucrania en dos o tres partes, a imagen de la Alemania de la posguerra nazi, como si Ucrania fuera el Estado atacante y ya hubiera perdido la guerra.

Ojo, que Europa también está bajo amenaza. El que Trump prevea reducir el número de tropas estadounidenses en Europa y exija a cada Estado miembro de la OTAN que gaste un 5 % del PIB en defensa no es sino una muestra de su convencimiento de que la defensa de Europa es problema de Europa.

Mientras, Putin no pierde detalle. Para Rusia, una OTAN desprovista de la batuta estadounidense no constituye ni una fuerza defensiva ni disuasoria. ¿Cuánto tiempo llevaría constituir una «Europa de la defensa» capaz de garantizar por sí sola su propia seguridad? Si esa pregunta les resulta demasiado abstracta, intenten responder a esta otra: ¿quién, entre todos los europeos, acudiría a defender a los Estados bálticos en caso de que Rusia los ataque una vez complete sus operaciones de formación en Bielorrusia, en septiembre de 2025?

Tras la traición de Estados Unidos, las opciones que le quedan a la UE están muy claras: defender hoy a Ucrania con el mismo ahínco con que se defendería a sí misma o afrontar mañana en su propio territorio al ejército ruso. Nos espera una ardua lucha, pero ninguna batalla debe darse por perdida antes de librarla.

No he podido pasar por alto una encuesta de finales de marzo en la que se recabó la opinión pública ucraniana: más del 80 % de los entrevistados se mostraron dispuestos a continuar la lucha contra Rusia, incluso sin el apoyo de los Estados Unidos.

Está por ver cuántos europeos lucharán a nuestro lado.

Ocultar
Noticias del CESE

El CESE aunará fuerzas con la Comisión para defender a la sociedad civil

En un debate con Michael McGrath, comisario de Democracia, Justicia, Estado de Derecho y Protección de los Consumidores, el CESE advirtió de los continuos intentos por acallar, desacreditar y debilitar a quienes defienden la democracia, la justicia social y los derechos fundamentales, y expresó su disponibilidad a aunar fuerzas con la Comisión para proteger a la sociedad civil europea y luchar contra la polarización.

En un debate con Michael McGrath, comisario de Democracia, Justicia, Estado de Derecho y Protección de los Consumidores, el CESE advirtió de los continuos intentos por acallar, desacreditar y debilitar a quienes defienden la democracia, la justicia social y los derechos fundamentales, y expresó su disponibilidad a aunar fuerzas con la Comisión para proteger a la sociedad civil europea y luchar contra la polarización.

El Comit&e...Leer

En un debate con Michael McGrath, comisario de Democracia, Justicia, Estado de Derecho y Protección de los Consumidores, el CESE advirtió de los continuos intentos por acallar, desacreditar y debilitar a quienes defienden la democracia, la justicia social y los derechos fundamentales, y expresó su disponibilidad a aunar fuerzas con la Comisión para proteger a la sociedad civil europea y luchar contra la polarización.

El Comité Económico y Social Europeo (CESE) está listo para desempeñar un papel activo en la futura estrategia para la sociedad civil de la Comisión Europea, cuya elaboración tiene por objeto reforzar la democracia y el espacio cívico y unir a unas comunidades divididas por toda la UE. Ante los crecientes ataques contra grupos de la sociedad civil y medios de comunicación independientes, el CESE asume el compromiso de movilizarse en su rechazo y ayudar a proteger los cimientos de una sociedad libre y abierta.

«El CESE se mantiene firme en su empeño de defender, amparar y empoderar a la sociedad civil. Como hogar de la sociedad civil europea, no seremos observadores pasivos. Rechazaremos de forma activa los intentos por debilitar el espacio cívico. Defenderemos un mayor apoyo, una mejor protección y un mayor reconocimiento del papel de la sociedad civil en el fortalecimiento de nuestras democracias», subrayó el presidente del CESE, Oliver Röpke, en el pleno del CESE del 27 de marzo, durante el cual se celebró un debate de alto nivel sobre la despolarización de las sociedades con el comisario McGrath.

El Sr. Röpke afirmó que las ONG y los movimientos de base se enfrentan cada vez más al retroceso de la democracia, leyes restrictivas, campañas de difamación y demandas estratégicas que tienen por objeto silenciar la disidencia y se enmarcan dentro de un intento más amplio por desacreditar y debilitar a quienes defienden la democracia, la justicia social y los derechos fundamentales.

En referencia a las recientes acusaciones contra ONG ecologistas, lanzadas por algunos diputados al Parlamento Europeo, el Sr. Röpke alertó de la especial inquietud que suscita que los ataques no solo provengan de fuera de nuestras instituciones, sino también de su interior en algunos casos.

El comisario McGrath afirmó que el CESE se encuentra en una posición privilegiada para aportar una contribución de gran valor a los esfuerzos de la Comisión por reforzar la democracia y superar las divisiones en la sociedad. En su opinión, la mejor manera de hacer frente a la polarización es empoderar a los europeos y hacer que se sientan representados: «Si lo conseguimos, lograremos acercar entre sí a nuestras comunidades, nuestras sociedades y nuestra Unión. Hagamos lo que hagamos, sabemos que la participación de las organizaciones de la sociedad civil seguirá siendo crucial».

La nueva estrategia de la UE para la sociedad civil, anunciada en el programa de trabajo de la Comisión para 2025, apoyará, protegerá y empoderará a las organizaciones de la sociedad civil y a quienes defienden los derechos humanos.

El debate en el pleno también presentó las principales conclusiones de la Semana de la Sociedad Civil 2025 del CESE, celebrada bajo el lema «El refuerzo de la cohesión y la participación en las sociedades polarizadas». Entre los oradores figuraron Brikena Xhomaqi, copresidenta del Grupo de Enlace, que expuso las principales reivindicaciones de la Semana, Richard Vaško, de la Asociación Eslovaca de Debate, ganadora del Premio Sociedad Civil, y la activista juvenil Kristýna Bulvasová, que presentó las principales recomendaciones del acto anual del CESE dedicado a la juventud, ¡Tu Europa, tu voz! (YEYS).(ll)

Ocultar

El CESE recomienda encarecidamente adoptar un programa de trabajo de la UE más ambicioso e inclusivo

El Comité Económico y Social Europeo (CESE) ha pedido que el programa de trabajo de la Comisión Europea para 2025, que fija las prioridades legislativas y políticas de la UE, se centre en la resiliencia económica, la equidad social y la sostenibilidad. Durante un debate en el pleno con Valdis Dombrovskis, comisario de Economía y Productividad, el CESE —que desempeña un papel crucial en la configuración del programa de trabajo— reafirmó su compromiso de contribuir al desarrollo de una agenda que aborde los retos urgentes y construya una Unión Europea más inclusiva y orientada al futuro.

El Comité Económico y Social Europeo (CESE) ha pedido que el programa de trabajo de la Comisión Europea para 2025, que fija las prioridades legislativas y políticas de la UE, se centre en la resiliencia económica, la equidad social y la sostenibilidad. Durante un debate en el pleno con Valdis Dombrovskis, comisario de Economía y Productividad, el CESE —que desempeña un papel crucial en la configuración del programa de traba...Leer

El Comité Económico y Social Europeo (CESE) ha pedido que el programa de trabajo de la Comisión Europea para 2025, que fija las prioridades legislativas y políticas de la UE, se centre en la resiliencia económica, la equidad social y la sostenibilidad. Durante un debate en el pleno con Valdis Dombrovskis, comisario de Economía y Productividad, el CESE —que desempeña un papel crucial en la configuración del programa de trabajo— reafirmó su compromiso de contribuir al desarrollo de una agenda que aborde los retos urgentes y construya una Unión Europea más inclusiva y orientada al futuro.

En diciembre de 2024, el CESE presentó su contribución al programa de trabajo bajo el título «Avanzar juntos: una Unión más audaz, sencilla y más rápida». Con esta visión busca abordar de frente los retos económicos y geopolíticos de la UE. Cada año, a través de amplias consultas y recomendaciones, el CESE perfecciona el programa de trabajo para garantizar que sirva de la mejor manera posible a la ciudadanía y las empresas europeas.

Oliver Röpke, presidente del CESE, acogió con satisfacción la estrecha colaboración con la Comisión Europea y, si bien reconoció los esfuerzos de la Comisión, pidió un enfoque más ambicioso e inclusivo. «Seguimos comprometidos con la elaboración de unas políticas que promuevan la estabilidad económica, la equidad social y los valores democráticos», afirmó.

El Sr. Dombrovskis reafirmó que el programa de trabajo de la Comisión para los próximos cinco años tiene por objeto impulsar la competitividad económica y la seguridad. «Tomar medidas que reduzcan la burocracia es un elemento importante para construir una Europa más competitiva. Nuestra agenda de simplificación consiste en garantizar que nuestras normas, en lugar de suponer un obstáculo para nuestros objetivos económicos, sociales, medioambientales y de seguridad, contribuyan a alcanzarlos», añadió.

Prioridades clave para 2025

Crecimiento económico y competitividad

El programa de trabajo se centra en las reformas estructurales, el nuevo marco financiero plurianual (MFP) y el fortalecimiento de los mercados de capitales. El CESE aboga por un enfoque más amplio de la resiliencia económica que aborde la lentitud del crecimiento, la crisis del coste de la vida y el incremento de la incertidumbre geopolítica.

Una regulación no solo más simplificada, sino también más inteligente

El CESE apoya el compromiso de la Comisión de reducir las cargas administrativas, pero advierte que la simplificación normativa no debe ir en detrimento de la protección social o las normas medioambientales.

Impulsar la innovación y la inversión

Al hacer especial hincapié en las redes digitales, la inteligencia artificial y las tecnologías cuánticas, el programa de trabajo convierte el liderazgo tecnológico de la UE en una prioridad. El CESE insta a la Comisión a que cree condiciones que impidan las salidas de capital y fomenten la inversión a largo plazo en Europa.

Una Europa más justa y más ecológica

El programa de trabajo, que da respuesta a retos como la escasez de capacidades, la seguridad alimentaria y las finanzas sostenibles, tiene por objeto reforzar la sostenibilidad social y medioambiental. El CESE subraya la importancia de las políticas que promueven la cohesión social y una transición digital justa.

Preparación para la ampliación y el futuro

Ante la posibilidad de que la UE avance hacia una posible ampliación más allá de 2028, el programa de trabajo esboza planes de estabilidad financiera y política. El CESE insiste en que deben tenerse en cuenta los puntos de vista de la sociedad civil a fin de garantizar que las políticas satisfagan las necesidades de todos los europeos. (tk)

Ocultar

La nueva visión de la agricultura de la UE supone un avance alentador para proteger a los agricultores

El Comité Económico y Social Europeo (CESE) acoge con satisfacción la nueva «visión de la agricultura y la alimentación», una hoja de ruta para la reforma destinada a reforzar la posición de los agricultores y erigir sistemas alimentarios sostenibles. No obstante, el CESE exige una mayor ambición a la hora de abordar la política agrícola común (PAC).

El Comité Económico y Social Europeo (CESE) acoge con satisfacción la nueva «visión de la agricultura y la alimentación», una hoja de ruta para la reforma destinada a reforzar la posición de los agricultores y erigir sistemas alimentarios sostenibles. No obstante, el CESE exige una mayor ambici&oacute...Leer

El Comité Económico y Social Europeo (CESE) acoge con satisfacción la nueva «visión de la agricultura y la alimentación», una hoja de ruta para la reforma destinada a reforzar la posición de los agricultores y erigir sistemas alimentarios sostenibles. No obstante, el CESE exige una mayor ambición a la hora de abordar la política agrícola común (PAC).

La visión, debatida durante el pleno del CESE del 27 de marzo, contempla medidas para impulsar el poder de negociación de los agricultores, aumentar la transparencia de la cadena de suministro y mejorar el diálogo sobre política alimentaria. Christophe Hansen, comisario de Agricultura de la UE, la ha descrito como una «respuesta específica a los llamamientos en favor de un sector agroalimentario competitivo, justo y resiliente» y ha recalcado la importancia de colaborar estrechamente con todas las partes interesadas, en particular con la sociedad civil.

Oliver Röpke, presidente del CESE, señaló que la visión refleja muchas de las prioridades del Comité, al afirmar que «reconoce el papel fundamental que desempeñan todos los operadores agroalimentarios a la hora de garantizar la sostenibilidad y la competitividad», tras lo cual añadió que las recomendaciones del CESE han llegado a ser más audaces que las propuestas de la Comisión en algunos ámbitos.

Los miembros del CESE han acogido favorablemente las iniciativas destinadas a reforzar las funciones de los productores en negociaciones y contratos. Así, Stoyan Tchoukanov, ponente del Dictamen del CESE Modificación del Reglamento por el que se crea la organización común de mercados (OCM), afirmó, en lo atinente al refuerzo de la posición de los agricultores en la negociación y celebración de contratos, que «los contratos escritos provistos de una cláusula de revisión impulsarán la transparencia y el poder de negociación de los agricultores».

La Comisión tiene previsto asimismo mejorar la cooperación en todo el sistema alimentario mediante la promoción de una producción sostenible y una alimentación más saludable. Emilie Prouzet, ponente del Dictamen del CESE Nuevas normas sobre el control del cumplimiento transfronterizo frente a las prácticas comerciales desleales, considera que tal medida supone un primer paso para apoyar a los agricultores sin incurrir en inseguridad jurídica.

La visión comprende el compromiso de instaurar un nuevo sistema europeo de gestión de riesgos y crisis que da respuesta a los llamamientos del CESE en favor de la creación de instrumentos más sólidos de gestión de las perturbaciones medioambientales, climáticas y del mercado. Además, está previsto que se adopte una estrategia en materia de relevo generacional que apoye a los jóvenes agricultores concediéndoles acceso a tierras, capacidades de inversión e infraestructuras rurales.

Pese al gran apoyo que ha recabado, la visión sigue suscitando inquietud. Quienes participaron en el debate señalaron las dificultades que plantea examinar la reforma de la PAC posterior a 2027 sin conocer con claridad el próximo presupuesto de la UE. En este sentido, el CESE también pide que las condiciones sociales se apliquen con mayor rigurosidad y advierte de que la visión no aborda plenamente cuestiones como la concentración del mercado y la especulación financiera que afecta a los precios de los alimentos.

El CESE ha reafirmado su papel como socio clave para materializar la visión de la Comisión en una política y se ha comprometido a mantener una cooperación constante, a fin de velar por la protección de los intereses de agricultores, productores, trabajadores y consumidores en la configuración del futuro de la agricultura de la UE. (ks)

Ocultar

¿Puede el pacto europeo de los océanos contribuir a una economía azul sostenible?

El Comité Económico y Social Europeo (CESE) ha dado su apoyo al pacto europeo de los océanos y ha instado a la Comisión Europea a garantizar que vaya más allá de una mera declaración de intenciones y se convierta en un marco de actuación sólido. 

El Comité Económico y Social Europeo (CESE) ha dado su apoyo al pacto europeo de los océanos y ha instado a la Comisión Europea a garantizar que vaya más allá de una mera declaración de intenciones y se convierta en un marco de actuación sólido....Leer

El Comité Económico y Social Europeo (CESE) ha dado su apoyo al pacto europeo de los océanos y ha instado a la Comisión Europea a garantizar que vaya más allá de una mera declaración de intenciones y se convierta en un marco de actuación sólido.

El pacto debe adecuarse a las políticas existentes de la UE, como el Pacto Verde, la estrategia para una economía azul y los Objetivos de Desarrollo Sostenible, al tiempo que establece un equilibrio entre el crecimiento económico, la protección del medio ambiente y la justicia social.

El cambio climático, la contaminación y la sobrepesca representan una amenaza para los océanos y las comunidades costeras. El pacto tiene por objeto mejorar la gobernanza, impulsar la innovación y promover una economía azul sostenible. Los resultados de una reciente consulta pública y las contribuciones de la sociedad civil confirman que se está forjando un consenso cada vez mayor en torno a medidas audaces e inclusivas.

Javier Garat Pérez, ponente del Dictamen, señaló: «Las comunidades costeras en Europa se enfrentan a una serie de desafíos económicos, sociales y medioambientales interrelacionados. Para superar estos desafíos, tenemos que promover una economía azul sostenible y competitiva (que incluya la pesca y la acuicultura), mantener a los océanos sanos, resilientes y productivos, y centrarnos en una agenda mundial en pro del conocimiento, la investigación, la innovación y la inversión en el sector marino».

El CESE pide que se simplifique el modelo de gobernanza de las agencias de la UE, se mejore la planificación del espacio marítimo y se invierta en la investigación a través de programas como Horizonte Europa. Por otro lado, aboga por un plan de acción para los alimentos azules, una construcción naval sostenible y una transición justa para los trabajadores del sector marítimo. Además, considera esencial apoyar el patrimonio costero y la participación de la juventud.

El éxito del pacto pasa por una firme voluntad política, la disponibilidad de financiación y la rendición de cuentas. Y si se aplica correctamente, podría convertir a Europa en líder mundial de la sostenibilidad de los océanos, aportando tanto resiliencia ecológica como oportunidades económicas. (ks) 

Ocultar

Puertas abiertas, sonrisas listas: ¡el Día de Europa se acerca y estamos preparados para darte la bienvenida!

El 10 de mayo, adéntrate en el corazón y la casa de la sociedad civil organizada europea: el Comité Económico y Social Europeo, ubicado en el edificio Jacques Delors, rue Belliard 99, 1040 Bruselas.

El 10 de mayo, adéntrate en el corazón y la casa de la sociedad civil organizada europea: el Comité Económico y Social Europeo, ubicado en el edificio Jacques Delors, rue Belliard 99, 1040 Bruselas.

El Día de Europa de este año es muy especial, ya que conmemoramos el 75.º aniversario de la Declaración Schuman, el fundamento histórico de la unidad y la cooperación europeas. En esta solemne oc...Leer

El 10 de mayo, adéntrate en el corazón y la casa de la sociedad civil organizada europea: el Comité Económico y Social Europeo, ubicado en el edificio Jacques Delors, rue Belliard 99, 1040 Bruselas.

El Día de Europa de este año es muy especial, ya que conmemoramos el 75.º aniversario de la Declaración Schuman, el fundamento histórico de la unidad y la cooperación europeas. En esta solemne ocasión, el CESE abre sus puertas para un día completo de actividades atractivas, informativas y entretenidas y una visita llena de descubrimientos.
Ya se trate de entusiastas de la política o de mentes jóvenes y curiosas, ¡hay algo para todo el mundo!

Ve obteniendo sellos a medida que exploras el CESE con nuestra Visita de Descubrimiento:

  • Afronta divertidos retos en los diferentes puestos temáticos.
  • En cada uno de ellos te estamparán un sello en un pasaporte que te entregaremos a tu llegada.
  • ¡Muéstranos tu pasaporte completo y reclama tu recompensa especial!

¡No pierdas la oportunidad de reunirte y charlar con el presidente del CESE, Oliver Röpke, en un puesto habilitado expresamente! 
Estará allí para recibir a los visitantes, responder a tus preguntas y compartir su visión de la sociedad civil europea: una oportunidad única para entablar contacto directo con los dirigentes del CESE.

Disfruta aún más gracias a:

  • un caricaturista que dibujará tu retrato;
  • un lúdico rincón infantil;
  • un desenfadado fotomatón;
  • una Rueda de la Fortuna con giros llenos de sorpresas;
  • ¡y una simulación de votación en tiempo real que te permitirá ponerte en la piel de un miembro del CESE!

Descubre además cómo contribuyen nuestros grupos y secciones a configurar las políticas y los valores de la UE.

Celebremos las ideas que unen a Europa. Ven con tus amigos, con tu familia o por tu cuenta, pero ¡NO TE LO PIERDAS!

Es más que una visita: ¡llegarás lleno de curiosidad y saldrás cargado de inspiración!

Para más información sobre toda la gama de actividades en el CESE programadas para el Día de Europa: ¡Visítanos el 10 de mayo para celebrar el Día de Europa! | CESE.

#EuropeDay (kk)

Ocultar

Anótenlo en la agenda: La Semana Verde de la UE llega a Bruselas en junio

La Semana Verde de la UE, que tendrá lugar del 3 al 5 de junio, estará dedicada a una Europa limpia, competitiva y circular.

La Semana Verde de la UE, que tendrá lugar del 3 al 5 de junio, estará dedicada a una Europa limpia, competitiva y circular.

La Plataforma Europea de Partes Interesadas de la Economía Circular, iniciativa emblemática del Comité Económico y Social Europeo (CESE) y de la Comisión, se enorgullece de su participación en la organización de la ...Leer

La Semana Verde de la UE, que tendrá lugar del 3 al 5 de junio, estará dedicada a una Europa limpia, competitiva y circular.

La Plataforma Europea de Partes Interesadas de la Economía Circular, iniciativa emblemática del Comité Económico y Social Europeo (CESE) y de la Comisión, se enorgullece de su participación en la organización de la Semana Verde de la UE de 2025, que estará dedicada a las soluciones circulares para una UE competitiva. La conferencia de este año abordará la forma en que la economía circular puede fomentar la competitividad sostenible, reducir los residuos e impulsar la innovación. Del 3 al 4 de junio se explorarán los aspectos políticos de la circularidad en debates de alto nivel que irán seguidos, el 5 de junio, de debates en profundidad con las partes interesadas sobre el potencial de la circularidad para lograr una Europa eficiente en el uso de los recursos a la par que competitiva.

El acto también brindará la oportunidad de presentar el informe sobre el diálogo con las partes interesadas, celebrado el 10 de abril en el CESE. Este acto de «calentamiento» de cara a la conferencia dio la ocasión a las partes interesadas de mantener animados debates sobre el Pacto por una Industria Limpia, la Estrategia de Bioeconomía y la futura Ley de Economía Circular.

Inscríbase en la conferencia de la Semana Verde de la UE aquí. (ac)

Ocultar
Noticias de los grupos

Europa necesita medios financieros suficientes para realizar sus ambiciones

Por Antonio García Del Riego, miembro del Grupo de Empresarios del CESE

Europa se encuentra en una coyuntura crítica, ya que se enfrenta a retos históricos que van desde la transición ecológica hasta una guerra a sus mismas puertas, pasando por una competencia mundial que se intensifica. Hacer frente a estos retos requerirá algo más que declaraciones políticas: se necesitará dinero y la capacidad de movilizarlo, canalizarlo y multiplicar su impacto. En resumen, se requiere un sistema financiero sólido, competitivo y autónomo. Lamentablemente, no es eso lo que tenemos.

Por Antonio García Del Riego, miembro del Grupo de Empresarios del CESE

Europa se encuentra en una coyuntura crítica, ya que se enfrenta a retos históricos que van desde la transición ecológica hasta una guerra a sus mismas puertas, pasando por una competencia mundial que se intensifica. Hacer frente a estos retos requerirá algo más que declaraciones políticas: se necesitará dinero y la capa...Leer

Por Antonio García Del Riego, miembro del Grupo de Empresarios del CESE

Europa se encuentra en una coyuntura crítica, ya que se enfrenta a retos históricos que van desde la transición ecológica hasta una guerra a sus mismas puertas, pasando por una competencia mundial que se intensifica. Hacer frente a estos retos requerirá algo más que declaraciones políticas: se necesitará dinero y la capacidad de movilizarlo, canalizarlo y multiplicar su impacto. En resumen, se requiere un sistema financiero sólido, competitivo y autónomo. Lamentablemente, no es eso lo que tenemos.

Las finanzas son la savia de cualquier economía moderna. Cada nueva fábrica, vehículo eléctrico, ampliación hospitalaria o empresa emergente dedicada a las tecnologías limpias depende de que alguien asuma el riesgo de financiarla. Y en Europa, ese «alguien» suele ser un banco. Las pymes, que constituyen el 99 % de las empresas de la UE, dependen en su inmensa mayoría del crédito bancario para crecer, invertir y exportar. Sin embargo, las mismas instituciones que forman el núcleo de nuestro ecosistema de financiación corren el riesgo de verse superadas y sometidas a una regulación excesiva.

En Europa, hablamos a menudo de «autonomía estratégica» en materia de energía, defensa e infraestructura digital, pero rara vez mencionamos la autonomía financiera. Y deberíamos hacerlo.

En la actualidad, solo cuatro bancos estadounidenses gestionan más del 60 % de la actividad de la banca de inversión en Europa. Las futuras normas de Basilea IV se aplicarán íntegramente en la UE, pero no en los Estados Unidos, el Reino Unido o Japón. Esta asimetría coloca a los bancos europeos en una situación de desventaja competitiva. Si queremos que los bancos europeos financien la doble transición y presten su apoyo a los sectores estratégicos, deben poder competir en pie de igualdad.

La unión de los mercados de capitales debe ir más allá de la retórica y convertirse en un verdadero mercado único para el ahorro y las inversiones. Para lograrlo, necesitamos una regulación inteligente, proporcionada y capacitadora que salvaguarde la estabilidad y proteja a los consumidores, pero también que impulse el crecimiento y la competitividad. Esto implica:

  • proporcionalidad;
  • neutralidad tecnológica, y
  • normas basadas en resultados.

Europa no puede permitirse ser ingenua. En un mundo cada vez más marcado por la política de poder y los bloques económicos, la fortaleza financiera es soberanía. Esto es algo que los Estados Unidos y China entienden. Más nos valdría entenderlo nosotros también.

Ocultar

Aranceles, desinformación y caos: ¿cuál es el siguiente paso para Europa?

Por el Grupo de Trabajadores del CESE

«Es imposible que alguien mienta, a menos que crea que sabe la verdad. Soltar patrañas no requiere tal convicción». El trabajo del filósofo Harry G. Frankfurt Sobre la charlatanería (On bullshit) resulta especialmente relevante tras el denominado «Día de la liberación». 

Por el Grupo de Trabajadores del CESE

«Es imposible que alguien mienta, a menos que crea que sabe la verdad. Soltar patrañas no requiere tal convicción». El trabajo del filósofo Harry G. Frankfurt Sobre la charlatanería (On bullshit) resulta especialmente relevante tras el denominado «Día de la liberación».

El 2 de abril, el presidente de los Estados Unidos anunció un arancel general del 10...Leer

Por el Grupo de Trabajadores del CESE

«Es imposible que alguien mienta, a menos que crea que sabe la verdad. Soltar patrañas no requiere tal convicción». El trabajo del filósofo Harry G. Frankfurt Sobre la charlatanería (On bullshit) resulta especialmente relevante tras el denominado «Día de la liberación».

El 2 de abril, el presidente de los Estados Unidos anunció un arancel general del 10 % a las importaciones para todo y para todo el mundo, más otros específicos para los «peores infractores». Se exhibió una lista de estos infractores, con cifras de «aranceles recíprocos» para otros países, incluido un 20 % para la UE. Huelga decir que el hecho de que estas cifras carezcan de sentido y no se ajusten para nada a una definición adecuada de aranceles recíprocos no preocupó lo más mínimo al presidente. Tampoco pareció preocuparle mucho que el déficit comercial de la UE en el sector de los servicios casi equivalga al comercio global entre las dos partes. En su favor puede decirse que la exactitud nunca ha sido su fuerte.

A medida que nos adentramos en una nueva guerra comercial basada en el sinsentido, ¿qué deberían esperar los ciudadanos? Un aumento de la inflación, la incertidumbre del mercado y un duro golpe para las industrias europeas. Falta por ver si alguna de estas medidas beneficiará a los trabajadores estadounidenses.

Más allá de los aranceles, la UE debe proteger a sus trabajadores y los puestos de trabajo, amortiguando los efectos iniciales, no solo por los aranceles, sino también por la incertidumbre que genera la arbitrariedad con la que se imponen. Esto significa reactivar nuestra demanda interna y garantizar que la riqueza se redistribuya y utilice de manera eficaz.

También significa proteger nuestras industrias y sectores clave e invertir en ellos, diversificar las fuentes de energía, hacer frente a la crisis del coste de la vida y reformar la UE para que su proceso de toma de decisiones sea eficaz. Una sociedad fuerte y resiliente es lo único que puede impedir que aparezcan otros Trump en el continente. Los interlocutores sociales son un elemento fundamental de esta sociedad. No es por nada que uno de los enemigos jurados del dúo Musk-Trump son los sindicatos.

Ocultar

Los sistemas de protección social europeos bajo presión: el informe de 2024 del Observatorio de la Pobreza arroja luz sobre los retos actuales

Por el Grupo de Organizaciones de la Sociedad Civil del CESE

El 8 de abril, la Red Europea de Lucha contra la Pobreza (EAPN) presentó su último informe del Observatorio de la Pobreza, titulado «Hacia un enfoque sistémico de la protección social».

Por el Grupo de Organizaciones de la Sociedad Civil del CESE

El 8 de abril, la Red Europea de Lucha contra la Pobreza (EAPN) presentó su último informe del Observatorio de la Pobreza, titulado «Hacia un enfoque sistémico de la protección social».

El informe, que por primera vez se presentó en un Leer

Por el Grupo de Organizaciones de la Sociedad Civil del CESE

El 8 de abril, la Red Europea de Lucha contra la Pobreza (EAPN) presentó su último informe del Observatorio de la Pobreza, titulado «Hacia un enfoque sistémico de la protección social».

El informe, que por primera vez se presentó en un acto organizado conjuntamente con el Grupo de Organizaciones de la Sociedad Civil del CESE en Bruselas, se centra en los retos que deben superarse para garantizar unos sistemas de protección social sólidos y resilientes. Esta cuestión es especialmente pertinente en el contexto actual, ya que los estados del bienestar de la UE han de lidiar con las crecientes limitaciones financieras causadas por las restricciones del gasto nacional y el aumento del gasto en defensa y seguridad.

El informe, basado en las conclusiones de diecinueve organizaciones nacionales miembros de la EAPN, demuestra que conseguir implantar un enfoque sistémico para garantizar unos sistemas de protección social amplios y eficaces requiere estrategias integradas a largo plazo que conjuguen las dimensiones económica, social y medioambiental. Estas políticas deben apoyarse en datos sólidos y contrastados y en una participación significativa de las personas en situación de pobreza.

Las redes nacionales de la EAPN han manifestado su preocupación por los recortes en el gasto social. Además, algunos indicadores como los elevados niveles de no percepción de prestaciones sociales siguen suscitando dudas sobre la eficiencia de unas políticas que no logran llegar a las personas que necesitan estas prestaciones y tienen derecho a optar a ellas.

Según el informe, la respuesta a un mundo que evoluciona rápidamente en un entorno caracterizado por la digitalización, los conflictos bélicos, el envejecimiento demográfico y el cambio climático ha sido inadecuada, lo que pone de relieve la necesidad de recuperar el enfoque sistémico de las políticas sociales.

Juliana Wahlgren, directora de la EAPN, subraya la urgencia que reviste esta cuestión y afirma: «La UE debe proteger el Estado del bienestar y dar prioridad al gasto social. Para lograrlo, el informe del Observatorio de la Pobreza formula recomendaciones sobre la renta mínima, la crisis de la vivienda y la transición energética, entre otros temas. La eficacia y la adecuación son fundamentales. El año próximo la Comisión Europea pondrá en marcha la estrategia de la UE de lucha contra la pobreza, pero esta solo podrá tener éxito si los Estados miembros adoptan un enfoque verdaderamente sistémico de la protección social. Más del 20 % de la población de la UE está en riesgo de pobreza y, por esta razón, no podemos permitirnos seguir aplicando políticas fragmentadas: la protección social debe ser sólida, coordinada y eficaz».

Séamus Boland, presidente del Grupo de Organizaciones de la Sociedad Civil, declaró:«La erradicación de la pobreza exige una actuación firme por parte de todos los Estados miembros. Un elevado porcentaje de la pobreza que existe en la UE tiene carácter intergeneracional y sus efectos pueden ser especialmente duros en la vida de los menores y las personas mayores. Es preciso introducir medidas específicas, en ámbitos como la educación, la vivienda y el alto coste de la energía, que aborden las deficiencias del sistema. De lo contrario, la UE, como entidad política, experimentará dificultades para mantener la confianza de su ciudadanía».

Krzysztof Balon, vicepresidente del Grupo de Organizaciones de la Sociedad Civil y ponente del Dictamen del CESE sobre la primera estrategia de la UE de lucha contra la pobreza, anunciada en las orientaciones políticas para la próxima Comisión Europea 2024-2029, señaló:«Una estrategia eficaz de la UE para combatir la pobreza debe basarse en las experiencias de las personas en situación de pobreza y abordar sus necesidades. Debe respaldar también a las organizaciones de la sociedad civil y permitir que participen en el diseño y la aplicación de proyectos y medidas adecuados para luchar contra la exclusión social».

El Comité presentará su Dictamen en el pleno del CESE de los días 16 y 17 de julio.

Ocultar
Soon in the EESC/Cultural events

Semana de la Sociedad Civil 2025: la sociedad civil es fundamental para acabar con la polarización en Europa

La carga de reforzar la cohesión para despolarizar la sociedad recae en las organizaciones de la sociedad civil, que tienen la fuerza y la motivación para proteger los espacios cívicos y democráticos. Este fue el mensaje clave de la Semana de la Sociedad Civil, que ha organizado por segundo año consecutivo el Comité Económico y Social Europeo (CESE) para debatir la alarmante tendencia a una polarización generalizada en las sociedades de la UE.

La carga de reforzar la cohesión para despolarizar la sociedad recae en las organizaciones de la sociedad civil, que tienen la fuerza y la motivación para proteger los espacios cívicos y democráticos. Este fue el mensaje clave de la Semana de la Sociedad Civil, que ha organizado por segundo año consecutivo el Comité Económico y Social Europeo (CESE) para debatir la alarmante tendencia a una polarizaci&o...Leer

La carga de reforzar la cohesión para despolarizar la sociedad recae en las organizaciones de la sociedad civil, que tienen la fuerza y la motivación para proteger los espacios cívicos y democráticos. Este fue el mensaje clave de la Semana de la Sociedad Civil, que ha organizado por segundo año consecutivo el Comité Económico y Social Europeo (CESE) para debatir la alarmante tendencia a una polarización generalizada en las sociedades de la UE.

Más de ochocientas personas, entre ellas representantes de organizaciones de la sociedad civil, ONG y grupos juveniles, además de partes interesadas y periodistas, se reunieron en el CESE del 17 al 20 de marzo con motivo de la Semana de la Sociedad Civil para intercambiar puntos de vista y debatir la manera de reforzar la cohesión y la participación en sociedades polarizadas.

En la Semana de la Sociedad Civil se celebraron catorce sesiones organizadas por miembros del Grupo de Enlace del CESE y socios del Día de la Iniciativa Ciudadana Europea (ICE), incluida la ceremonia de entrega del Premio Sociedad Civil del CESE. Los participantes elaboraron un conjunto completo de medidas ejecutables y demandas clave para unas sociedades más cohesionadas, en particular:

  • reforzar la cohesión mediante la educación y la cultura;
  • proporcionar viviendas asequibles y sostenibles;
  • impulsar la participación pública a través de la ICE;
  • garantizar una transición justa inclusiva y un crecimiento azul y verde;
  • concebir una estrategia europea sólida para la sociedad civil;
  • reforzar el apoyo y la financiación de las organizaciones de la sociedad civil;
  • involucrar a la juventud en la configuración de una Europa más fuerte y resiliente;
  • impulsar la innovación y la tecnología por el bien común.

En la sesión de clausura, Oliver Röpke, presidente del CESE, declaró: «Al dar por concluida esta segunda edición de la Semana de la Sociedad Civil, me siento profundamente inspirado por la energía, la resiliencia y el compromiso de los agentes de la sociedad civil de toda Europa. La Semana ha demostrado que una sociedad civil unida es capaz de aportar soluciones que refuercen nuestra democracia, fomenten la cohesión social y construyan una Europa que esté verdaderamente al servicio de su ciudadanía».

En nombre de la Comisión Europea, Henna Virkkunen, vicepresidenta ejecutiva para la Soberanía Tecnológica, la Seguridad y la Democracia, hizo hincapié en el papel crucial de las organizaciones de la sociedad civil para orientar a las sociedades en consonancia con los valores europeos fundamentales.

Victor Negrescu, vicepresidente del Parlamento Europeo, instó enérgicamente a las organizaciones de la sociedad civil a que pasaran a la acción y dieran muestras de su fortaleza para responder a la retórica agresiva: «Necesitamos una sociedad civil robusta y capaz de forjar una auténtica alianza con los responsables de la toma de decisiones para que juntos podamos construir una sociedad cohesionada, con incidencia real en la vida de las personas».

Los representantes de estas organizaciones subrayaron que la sociedad civil no es un mero proveedor de servicios, sino un componente esencial de los sistemas democráticas y participativos. Nataša Vučković, secretaria general de la organización serbia Centre for Democracy Foundation, expresó su optimismo en cuanto al papel fundamental que está llamada a desempeñar la sociedad civil en la lucha contra las causas profundas y la propagación de la retórica antidemocrática y antieuropea, tanto en la UE como en los países candidatos. Para ello, es preciso explicar lo que hace la Unión Europea y velar por que sus beneficios lleguen a todos los ciudadanos en su vida cotidiana. (at)

Ocultar

Un diagnóstico para Europa: la precariedad y la inseguridad como nueva normalidad

Nuestras sociedades están siendo consumidas por la precariedad ubicua, una enfermedad invisible que hace que la gente se sienta profundamente desempoderada y a merced de fuerzas que escapan a su control. Así lo afirma Albena Azmanova, profesora universitaria y autora galardonada, que pronunció un impactante discurso inaugural durante la Semana de la Sociedad Civil del CESE. En esta entrevista para EESC Info analiza las principales causas de esta epidemia, incluida la tendencia a dar prioridad a la igualdad sobre la estabilidad económica.

Nuestras sociedades están siendo consumidas por la precariedad ubicua, una enfermedad invisible que hace que la gente se sienta profundamente desempoderada y a merced de fuerzas que escapan a su control. Así lo afirma Albena Azmanova, profesora universitaria y autora galardonada, que pronunció un impactante discurso inaugural durante la Semana de la Sociedad Civil del CESE. En esta entrevista para EESC Info analiza las principales causas de esta epidemia, incluida...Leer

Nuestras sociedades están siendo consumidas por la precariedad ubicua, una enfermedad invisible que hace que la gente se sienta profundamente desempoderada y a merced de fuerzas que escapan a su control. Así lo afirma Albena Azmanova, profesora universitaria y autora galardonada, que pronunció un impactante discurso inaugural durante la Semana de la Sociedad Civil del CESE. En esta entrevista para EESC Info analiza las principales causas de esta epidemia, incluida la tendencia a dar prioridad a la igualdad sobre la estabilidad económica.

En su discurso inaugural durante la Semana de la Sociedad Civil, habló de una epidemia de precariedad como origen del declive de las libertades políticas. La describió como una enfermedad invisible que nos está enloqueciendo. ¿Podría explicarnos más detalladamente a qué se refiere cuando habla de una «epidemia de precariedad»? ¿Cuál es su origen?

Las personas están cada vez más exasperadas y las muertes provocadas por la desesperación —especialmente los suicidios en el lugar de trabajo— están aumentando en las sociedades prósperas. Es la punta más dolorosa y, por tanto, la más visible de un vasto pero invisible iceberg de precariedad motivada por la inseguridad de nuestros medios de subsistencia. No es solo que la gente esté indignada y que la confianza en las instituciones políticas esté disminuyendo, aunque a menudo oigamos hablar de estas cuestiones. La desconfianza puede ser sana, porque refuerza las exigencias de rendición de cuentas. El enfado puede ser productivo, ya que puede dar lugar a luchas en pro de la justicia y llevar a transformaciones significativas.

La enfermedad actual de nuestras sociedades, lo que en mis trabajos trato bajo la rúbrica de «precariedad ubicua», es diferente. Se trata de un tipo especial de inseguridad, un grave desempoderamiento debido a que las personas se sienten a merced de fuerzas que no pueden controlar.

Como individuos, vivimos la precariedad como una incapacidad para hacer frente a las tareas básicas de nuestras vidas. La sensación generada por esta incapacidad crea un temor a caer, a perder lo que tienes: tu trabajo, tus ahorros, tu capacidad de rendir y tu cordura. Por lo tanto, el problema no es tanto la pobreza o la desigualdad, sino la pérdida experimentada o prevista, el miedo a caer. Esta es la forma en que las personas experimentan la precariedad.

Las sociedades, en cambio, experimentan la precariedad como incapacidad para gobernarse y gestionar la adversidad. Pongamos como ejemplo la COVID-19. ¿Cómo fue posible que nuestras sociedades ricas, científicamente brillantes y sofisticadas desde el punto de vista institucional permitieran que un problema de salud pública, causado por un virus que no era ni del todo desconocido ni excesivamente mortal, se convirtiera primero en una grave crisis sanitaria y luego en una crisis económica y social? La respuesta es que nuestros Gobiernos habían reducido la inversión pública, incluida la relacionada con la asistencia sanitaria.

Existe otra característica de la precariedad causada por políticas específicas, por la combinación neoliberal de mercados libres y economías abiertas en la que las decisiones se basan en la rentabilidad. Con el fin de asegurar la competitividad nacional o de la UE en el mercado mundial y en un contexto de competencia planetaria por los beneficios, las élites de centroizquierda y de centroderecha se apresuraron a reducir tanto la seguridad laboral (para dar a las empresas una flexibilidad que las hiciese competitivas) como el gasto en servicios públicos. Esto hizo que todos tuviesen más responsabilidades, pero menos recursos para cumplirlas. Se nos pide hacer más con menos.

He aquí un ejemplo: la Comisión Europea está pidiendo a los Estados que hagan más por la justicia social al tiempo que les pide que reduzcan el gasto. Este desajuste entre unas responsabilidades que no paran de aumentar y unos recursos menguantes se traduce en un sentimiento de incertidumbre y en dudas sobre si seremos capaces de hacer frente a nuestras tareas. No estamos ante ese tipo de incertidumbre sana que nos impele a desear salir al mundo, considerar nuestras opciones, asumir riesgos o probar nuestra valía. De lo que se trata es de un miedo tóxico, del temor a perder tus medios de subsistencia y la anticipación de un futuro más oscuro.

En su opinión, ¿cuál es la causa del auge de los líderes autoritarios y los partidos de derechas? ¿Cómo valora la situación actual de las libertades democráticas y el respeto de los valores fundamentales de la UE en Europa?

El aumento del apoyo a los líderes y partidos autoritarios de derechas se debe a la precariedad generada políticamente.  Las personas se sienten inseguras, por lo que anhelan seguridad y estabilidad; se sienten desempoderadas, por lo que depositan sus esperanzas en líderes fuertes que proporcionarán una estabilidad inmediata forzada con mano de hierro. Por ejemplo, aumentan el gasto militar y dan más poder a la policía, tal como está a punto de hacer la UE.

Fueron los partidos centristas los que, al precarizar nuestras sociedades en nombre del neoliberalismo, crearon las condiciones para que sucediera todo esto. En mi opinión, la centroizquierda es especialmente responsable de esta lamentable situación. A pesar de que, según proclama la propia socialdemocracia, su vocación es luchar por la justicia, lo cierto es que se ha centrado en la lucha contra una única forma de injusticia: la desigualdad. Sin embargo, lo que la gente ansía es la estabilidad económica: la capacidad de gestionar sus vidas y de planificar su futuro.

Piénselo: podríamos tener sociedades perfectamente igualitarias, pero profundamente precarias, algo que difícilmente podríamos considerar una sociedad floreciente. Además, las personas no están necesariamente deseosas de erradicar la desigualdad si ello acarrea que se les trate como a perdedores a los que se compensa (y humilla) con un poco de redistribución: lo que realmente no quieren es llegar a convertirse en perdedores.

En su discurso también habló de «los Juegos Olímpicos del victimismo». ¿Podría describir qué es esto y por qué deberíamos evitarlo?

En las últimas cinco décadas, aproximadamente, la lucha contra la discriminación se ha manifestado en forma de políticas de identidad. A los grupos que históricamente habían sufrido discriminaciones se les trató como a «minorías protegidas», con un estatus elevado a través de medidas de discriminación positiva, como las promociones selectivas y los sistemas de cuotas. Cuando esto sucede en una situación de precariedad ubicua, en el que los buenos puestos de trabajo y otros recursos son escasos, estos grupos protegidos entran a competir por estos recursos limitados. En un contexto de estas características, la condición de víctima se convierte en una especie de baza determinante: cuanto mayor sea la victimización percibida, mayor será el derecho a ser protegido.

Por un lado, esto genera animosidad entre los grupos que compiten entre sí y erosiona la solidaridad. Por otro, ninguno de ellos gana realmente, ya que no dejan de ser víctimas. Después de todo, ser víctimas y sufrir discriminación es precisamente lo que les da motivos para pedir protección. Los únicos ganadores en esta desagradable competición por el acceso a los recursos y a una protección especial son las élites, que se presentan como magnánimos dispensadores de favores clientelares. El resultado final es que los grupos desempoderados luchan entre sí como enemigos, mientras que sus «benefactores», las élites políticas, obtienen más poder gracias a estas luchas. 

A la luz de todo esto, ¿por qué es la sociedad civil tan importante para la preservación de la democracia y las libertades civiles que muchos de nosotros damos por sentadas? ¿Por qué es la sociedad civil, y no las elecciones democráticas, el antídoto frente a los abusos de poder?

Cuando votamos, estamos solos. Sentimos nuestro desempoderamiento y las frustraciones de la inseguridad de forma acuciante, y damos voz a esta ansiedad a través de nuestro voto. De ahí el auge de los partidos reaccionarios en elecciones libres y justas. La sociedad civil se guía por una lógica distinta y cuenta con una fuente especial de poder: el sentimiento de comunidad. Cuando estamos acompañados, unidos por los lazos de una causa común, no estamos solos, sentimos una precariedad y un desempoderamiento menores, ya que podemos contar con el apoyo de nuestros compañeros. Una vez que se reduce el sentimiento de precariedad, el miedo disminuye y podemos mirar hacia adelante, podemos pensar «en grande».

Albena Azmanova es profesora de Ciencias Políticas y Sociales en City St George's, University of London, y coeditora de la revista Emancipations. Su último libro, Capitalism on Edge (2020), ha recibido varios premios, entre ellos el Michael Harrington Book Award, que la Asociación Americana de Ciencias Políticas otorga a «trabajos destacados que demuestran cómo puede utilizarse la investigación académica en la lucha por un mundo mejor». 

Ocultar

La importancia del pensamiento crítico

«Enseñamos a los estudiantes que los hechos deben comprobarse, pero que las opiniones deben debatirse con respeto. El verdadero pensamiento crítico respeta la pluralidad de opiniones», afirma Richard Vaško, de la Asociación Eslovaca de Debate (SDA). La Asociación fue galardonada con el Premio Sociedad Civil del CESE —que este año se dedicó a la lucha contra la polarización— por su iniciativa «La Olimpiada del Pensamiento Crítico». Richard, cuyo proyecto ganó el primer premio, nos habló de la Olimpiada y de por qué la enseñanza del pensamiento crítico es crucial en el actual mundo dominado por la polarización y la desinformación.

«Enseñamos a los estudiantes que los hechos deben comprobarse, pero que las opiniones deben debatirse con respeto. El verdadero pensamiento crítico respeta la pluralidad de opiniones», afirma Richard Vaško, de la Asociación Eslovaca de Debate (SDA). La Asociación fue galardonada con el Premio Sociedad Civil del CESE —que este año se dedicó a la lucha contra la polarización— por su iniciativa «La Olimpiada del Pensamie...Leer

«Enseñamos a los estudiantes que los hechos deben comprobarse, pero que las opiniones deben debatirse con respeto. El verdadero pensamiento crítico respeta la pluralidad de opiniones», afirma Richard Vaško, de la Asociación Eslovaca de Debate (SDA). La Asociación fue galardonada con el Premio Sociedad Civil del CESE —que este año se dedicó a la lucha contra la polarización— por su iniciativa «La Olimpiada del Pensamiento Crítico». Richard, cuyo proyecto ganó el primer premio, nos habló de la Olimpiada y de por qué la enseñanza del pensamiento crítico es crucial en el actual mundo dominado por la polarización y la desinformación.

¿Podrías describir un juego o una fase de la Olimpiada del Pensamiento Crítico? ¿Nos puedes dar un ejemplo de tarea o pregunta?

La Olimpiada del Pensamiento Crítico consta de una fase en las escuelas participantes y otra a escala regional; en ambas los estudiantes participan en pruebas resolviendo una serie de tareas. Para realizar estas pruebas, que duran de una a dos horas, se dispone siempre de acceso a internet y a herramientas de verificación de datos en línea. Los desafíos giran en torno a la alfabetización mediática, la detección de falacias lógicas, manipulaciones o sesgos, la interpretación de datos y estudios y la formulación por parte de los concursantes de sus propios argumentos.

Por ejemplo, en un caso reciente, se pidió a los estudiantes que elaboraran por escrito un argumento en torno a si deberían instalarse cámaras de seguridad en las escuelas para aumentar la seguridad, una cuestión de actualidad en el debate público eslovaco. En otra prueba se les pedía analizar un vídeo viral de TikTok en el que se daba pábulo a una teoría conspiratoria sobre Taylor Swift, y detectar en él elementos característicos del pensamiento conspirativo. En un tercer reto, se les hacía ver dos vídeos y tenían que decidir cuál de ellos había sido generado mediante IA y cuál era auténtico.

Todas las pruebas anteriores son accesibles públicamente (en eslovaco) en www.okm.sk.

¿Qué esperas lograr con la Olimpiada? ¿Qué te movió a iniciar el proyecto?

Nuestro objetivo es ayudar a los estudiantes —en la edad en que empiezan a utilizar las redes sociales y consumir contenidos digitales— a desarrollar las capacidades para navegar por este espacio de forma crítica, responsable y reflexiva. Gracias a las observaciones que se reciben regularmente después de cada fase y a los cursos de aprendizaje electrónico que se ofrecen para la preparación, los estudiantes adquieren hábitos y herramientas transferibles que pueden aplicar en la vida cotidiana. En última instancia, nuestro objetivo es formar a una generación de jóvenes que estén informados, sean resilientes frente a la desinformación y también capaces de liderar un diálogo constructivo y basado en datos contrastados.

Pusimos en marcha este proyecto como respuesta a una laguna crítica de nuestro sistema educativo: la alfabetización mediática y el pensamiento crítico siguen estando muy poco presentes en los planes de estudios oficiales. En Eslovaquia, más de la mitad de los alumnos nunca han tenido ocasión de aprender en la escuela a evaluar si una información determinada es fiable, y solo el 16 % de los jóvenes comprueban de forma regular la información procedente de los medios de comunicación. Como consecuencia de ello, el 56 % de la población tiende a creer teorías conspirativas o mentiras flagrantes. Queríamos cambiar esta situación mediante una acción que tuviera impacto y pudiera aplicarse a gran escala en las escuelas de todo el país.

¿Por qué crees que desarrollar el pensamiento crítico es tan importante en el contexto actual? ¿Tenemos posibilidades de ganar la guerra contra las noticias falsas?

Las noticias falsas siempre han existido bajo diferentes formas, pero ahora vivimos en una época de sobrecarga de información sin precedentes. En un contexto en el que las redes sociales representan la principal fuente de noticias para muchos jóvenes, cualquiera puede difundir fácilmente desinformación, información falsa o incitar al odio. Aprender a filtrar y navegar por este por este caótico entorno informativo se ha convertido en una capacidad esencial en nuestras vidas.

Con todo, nunca «ganaremos» por completo la guerra contra las noticias falsas: se trata de un blanco móvil, en constante evolución. Pero lo que sí podemos hacer es proporcionar herramientas a los jóvenes que les permitan poder orientarse mejor en este entorno, formular las preguntas acertadas y reflexionar antes de compartir algún contenido.

¿Qué comentarios has recibido de tu proyecto? ¿Podrías darnos un ejemplo?

Recopilamos información detallada después de cada fase, y las respuestas son abrumadoramente positivas. Por ejemplo, el 93 % de los profesores cuyos estudiantes participaron en la Olimpiada afirmaron que la experiencia les ha ayudado a aumentar la resiliencia de sus alumnos frente a la desinformación y los bulos. Además, nuestro «índice de promotores neto» (Net Promoter Score), un indicador clave que mide la satisfacción de los usuarios— alcanzó un +76 en la última fase, que se considera excelente.

¿Qué consejos darías a otras organizaciones de la sociedad civil para que obtengan resultados positivos en actividades y programas similares?

Cada país y contexto son diferentes, y las organizaciones locales son las que mejor saben lo que funciona en sus comunidades respectivas. Estos son algunos de los principios que nos han dado buenos resultados a nosotros:

En primer lugar, y lo más importante, no decimos a los jóvenes qué es lo que tienen que pensar. El verdadero pensamiento crítico respeta la pluralidad de puntos de vista. Si los alumnos sienten que sus opiniones no son tenidas en cuenta, o que se les dice lo que tienen que pensar, pierden interés. Les enseñamos que los hechos deben comprobarse, pero que las opiniones deben debatirse con respeto.

En segundo lugar, la accesibilidad y la inclusividad son fundamentales. A menos que «rompamos la burbuja» y salgamos de las escuelas de élite, no tendremos un impacto real. Nuestro programa es gratuito, totalmente en línea, fácilmente accesible y también está disponible en la lengua de nuestra minoría étnica más grande. Este año, el 53 % de los participantes procedían de escuelas secundarias de formación profesional.

En tercer lugar, hay que pensar desde el principio en la escalabilidad y aprovechar las nuevas tecnologías para lograrla. Utilizamos la IA para evaluar las respuestas abiertas, lo que nos permite mantener una experiencia educativa de alta calidad sin recurrir a pruebas de tipo test. Si bien es cierto que la era digital ha planteado serios retos, también nos proporciona potentes herramientas para abordarlos.

Richard Vaško es miembro de la Asociación Eslovaca de Debate (SDA) desde que tenía doce años. Durante el instituto fue campeón de la Liga nacional eslovaca de debate, y llegó a representar a Eslovaquia en los campeonatos mundiales de debate escolar. Se graduó en Derecho, Ciencias Políticas y Filosofía en la Universidad de Warwick (Reino Unido), y en la actualidad cursa los estudios del Máster en Educación (Conocimiento, Poder, Política) de la Universidad de Cambridge.

Trabaja en la SDA desde 2021, donde fundó la Olimpiada del Pensamiento Crítico, iniciativa de la que ahora es coordinador. También ha colaborado con el equipo de Comunicación Estratégica del Ministerio de Educación eslovaco (StratCom) y ha sido coautor de manuales de formación del profesorado sobre alfabetización mediática para el Instituto Nacional de Educación y Juventud. Junto a su trabajo de investigación, organiza una escuela multiétnica de verano para niños desfavorecidos con el Instituto Mathias Bel, una ONG que trabaja con las minorías étnicas y las comunidades gitanas marginadas de Eslovaquia.

Ocultar

EL PREMIO SOCIEDAD CIVIL DEL CESE EN POCAS PALABRAS

El emblemático Premio Sociedad Civil del CESE, que hasta la fecha se ha concedido en quince ocasiones, galardona proyectos que adoptan un enfoque especialmente creativo e innovador respecto de cuestiones muy pertinentes para la UE.

El emblemático Premio Sociedad Civil del CESE, que hasta la fecha se ha concedido en quince ocasiones, galardona proyectos que adoptan un enfoque especialmente creativo e innovador respecto de cuestiones muy pertinentes para la UE.

Puede presentar candidaturas cualquier organización de la sociedad civil registrada oficialmente en la Unión Europea que actúe a escala local, regional, nacional o europea. También pueden aspirar al Premio l...Leer

El emblemático Premio Sociedad Civil del CESE, que hasta la fecha se ha concedido en quince ocasiones, galardona proyectos que adoptan un enfoque especialmente creativo e innovador respecto de cuestiones muy pertinentes para la UE.

Puede presentar candidaturas cualquier organización de la sociedad civil registrada oficialmente en la Unión Europea que actúe a escala local, regional, nacional o europea. También pueden aspirar al Premio las personas residentes en la UE, así como las entidades que estén registradas u operen en la Unión, siempre que sus proyectos se conciban estrictamente sin ánimo de lucro.

Todas las iniciativas y proyectos que opten al Premio deben llevarse a cabo en la UE y deben haberse realizado o estar en curso antes de la fecha límite para la presentación de candidaturas.

El objetivo del Premio es concienciar sobre la extraordinaria contribución de la sociedad civil a crear una identidad y una ciudadanía europeas y promover los valores comunes que apuntalan la integración europea.

Cada año se elige un tema diferente: en 2023, los proyectos se centraron en la salud mental; en 2022, el CESE concedió el Premio con carácter excepcional a dos temas, a saber, la juventud y Ucrania; en 2021, el Premio reconoció los proyectos climáticos que promovían una transición justa; en 2020, a título excepcional, el CESE sustituyó su Premio Sociedad Civil por un Premio Solidaridad Civil dedicado a la lucha contra la COVID-19. Otros temas anteriores fueron la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer, las identidades europeas y el patrimonio cultural, y la migración.

En octubre de 2024, se puso en marcha el 15.º Premio Sociedad Civil del CESE sobre la lucha contra la polarización perjudicial de la sociedad europea.

La polarización es un tema que adquiere ahora más urgencia que nunca. En un contexto de múltiples crisis que se solapan, como la pandemia de COVID-19, la guerra de Rusia en Ucrania y la inestabilidad social y económica generalizada, ha aumentado la desconfianza en las instituciones y autoridades públicas, lo que representa un caldo de cultivo para la polarización perjudicial.

La sociedad civil desempeña un papel clave en la lucha contra esta desconfianza y en la vigilancia de los focos de polarización en línea y fuera de línea, mejorando la cohesión social y defendiendo los ideales democráticos. Junto con las autoridades públicas y la sociedad civil, el Premio puede ayudar a proteger la democracia liberal de las tendencias autoritarias.

Por este motivo, el CESE ha decidido laurear en la presente edición de su Premio Sociedad Civil a iniciativas sin ánimo de lucro que intervengan eficazmente mediante la aplicación de medidas preventivas, de alerta temprana y, en caso necesario, de distensión que garanticen la defensa de los valores democráticos, que la polarización no se vuelva perjudicial y que la retórica partidista no se traduzca en actos de violencia.

Ocultar

CONOZCA A LOS GANADORES

La 15.ª edición del Premio Sociedad Civil del CESE ha distinguido a tres asociaciones procedentes respectivamente de Eslovaquia, Bélgica y Francia, cuya lucha contra la polarización negativa es fuente de inspiración en toda Europa. Los galardonados se dieron a conocer el 20 de marzo en el transcurso de una ceremonia de entrega de premios celebrada durante la Semana de la Sociedad Civil.  

La 15.ª edición del Premio Sociedad Civil del CESE ha distinguido a tres asociaciones procedentes respectivamente de Eslovaquia, Bélgica y Francia, cuya lucha contra la polarización negativa es fuente de inspiración en toda Europa. Los galardonados se dieron a conocer el 20 de marzo en el transcurso de una ceremonia de entrega de premios celebrada durante la ...Leer

La 15.ª edición del Premio Sociedad Civil del CESE ha distinguido a tres asociaciones procedentes respectivamente de Eslovaquia, Bélgica y Francia, cuya lucha contra la polarización negativa es fuente de inspiración en toda Europa. Los galardonados se dieron a conocer el 20 de marzo en el transcurso de una ceremonia de entrega de premios celebrada durante la Semana de la Sociedad Civil.  

El premio en metálico se dividió entre los tres primeros clasificados, y la asociación ganadora recibió 14 000 EUR. El segundo premio se concedió a los otros dos finalistas, que recibieron 9 000 EUR cada uno.

PRIMER PREMIO: la Asociación Eslovaca de Debate, por «La Olimpiada del Pensamiento Crítico»

La Asociación Eslovaca de Debate (SDA) es una ONG de Eslovaquia, cuya misión es promover la amplitud de miras y el pensamiento crítico, y también fomentar la ciudadanía activa entre la juventud eslovaca. A través de una serie de programas, la SDA enseña a los jóvenes a evaluar hechos y opiniones, formular sus propios argumentos y analizar de manera crítica la información que difunden los medios de comunicación para encontrar fuentes creíbles. De este modo, se crea un espacio para un debate abierto y público sobre las cuestiones clave a las que se enfrenta la sociedad eslovaca.

Uno de los programas de mayor éxito, que se puso en marcha en 2021, es «La Olimpiada del Pensamiento Crítico». Esta iniciativa innovadora ya ha sido objeto de una amplia aceptación, con la participación el año pasado de unos 9 000 alumnos de más de trescientos centros escolares. Se trata de un concurso destinado a aumentar la resiliencia de los alumnos frente a la desinformación. La desinformación hace estragos en Eslovaquia donde el 61 % de la población desconfía de los medios de comunicación y más de la mitad cree en teorías de la conspiración. La Olimpiada trabaja para hacer frente a este reto de manera directa mediante el desarrollo de la alfabetización mediática y la modificación de los hábitos de consumo de los jóvenes.

En este concurso de tres rondas, dirigido a tres grupos de edad (entre los cursos 8.º y 13.º), los alumnos se enfrentan a una serie de retos mediáticos del mundo real. Las tareas están diseñadas para reflejar contenidos a los que pueden estar expuestos los alumnos en su vida cotidiana. Analizan vídeos de TikTok, verifican contenidos creados por la IA, evalúan publicaciones de Instagram e intentan distinguir entre la realidad y la información errónea. Los alumnos también participan en un debate público en el que exponen sus argumentos ante sus compañeros.

«La Olimpiada del Pensamiento Crítico contribuye a la despolarización de la sociedad, pues enseña a miles de estudiantes a aceptar perspectivas diversas, reconocer los sesgos cognitivos y articular sus puntos de vista de manera constructiva», afirmó Richard Vaško, fundador y coordinador del programa. «Al reforzar el pensamiento crítico y la alfabetización mediática a través de este proyecto basado en las capacidades, empoderamos a los jóvenes para que resistan ante la desinformación y participen con discernimiento en los debates sociales».

SEGUNDO PREMIO: la asociación francesa Reporters d’Espoirs, por su «Prix Européen Jeunes Reporters d'Espoirs»

Reporters d’Espoirs es una organización sin ánimo de lucro, creada en 2003, que impulsó el enfoque muy generalizado de «periodismo de soluciones» para responder a los retos a los que se enfrenta la sociedad hoy en día. La asociación anima a los periodistas a adoptar esta actitud positiva y recompensa, mediante una serie de premios, las mejores innovaciones periodísticas y editoriales de profesionales del sector y jóvenes.

El «Prix Européen Jeunes Reporters d'Espoirs» es una iniciativa destinada a recompensar y formar a periodistas en el periodismo de soluciones en lengua francesa. Este programa polifacético ofrece a los candidatos la oportunidad de aprender periodismo de soluciones a través de un curso en línea organizado en colaboración con la Escuela de Periodismo de Aix-Marsella. Cada candidato cuenta además con un tutor que le ayuda a perfeccionar su expresión oral y escrita, y recibe formación en el arte de la presentación. Asimismo, se invita a los ganadores a un viaje de estudios de 48 horas en París, durante el cual se reúnen con otros periodistas y expertos afines de toda Europa. A continuación, se conceden premios a seis ganadores por un importe total de 10 000 EUR.

«La lucha contra la polarización es consustancial al método del periodismo de soluciones que consiste en mostrar la complejidad del mundo, la diversidad de agentes que actúan a todos los niveles y en todos los países, juntos o por separado, al tiempo que describe la capacidad de difusión de las iniciativas emprendidas a escala local», declaró Gilles Vanderpooten, director de Reporters d’Espoirs.

Durante sus tres primeras ediciones, el premio recibió más de cuatrocientas candidaturas de veinticinco países. La edición actual, que es la cuarta, va camino de superar las trescientas candidaturas. La asociación ya ha ayudado a más de setenta y cinco candidatos a perfeccionar su expresión oral y escrita en francés.

La idea es fácil de reproducir y el equipo ya está en conversaciones con periodistas españoles, italianos y belgas para colaborar con ellos y seguir difundiendo la iniciativa.

«Nuestra ambición es extender el premio del mundo francófono a otros contextos lingüísticos de la Unión Europea», aseguró el Sr. Vanderpooten. «Esta es la clave para que cada vez más jóvenes participen en la “Europa de las soluciones”».

TERCER PREMIO: la asociación belga FEC Diversité asbl, por su proyecto «ESCAPE GAME EXTREME DROITE pour se désintoxiquer».

Las ideologías de derechas se están afianzando en Europa y en todo el mundo. Los partidos de extrema derecha están ganando terreno y el populismo va en aumento. La asociación belga sin ánimo de lucro FEC Diversité ha desarrollado un método, dirigido a profesores, sindicatos y ciudadanos de a pie, para contrarrestar estas opiniones.

«ESCAPE GAME EXTREME DROITE pour se désintoxiquer» es un juego de estrategia que permite a los jugadores «desintoxicarse» de las ideas de extrema derecha de manera divertida y atractiva. Se informa a los jugadores de que han sido infectados por ideologías de extrema derecha y deben descontaminarse realizando una serie de tareas. De este modo, aprenden cómo se difunden y amplifican en la sociedad las ideas de extrema derecha.

Los jugadores se dividen en cuatro distritos, cada uno con pruebas específicas que deben superar. En el distrito A, los participantes dialogan sobre el impacto de la extrema derecha en el lugar de trabajo, mediante interacciones con diecinueve objetos. En el distrito B, leen fragmentos de testimonios reales de migrantes para comprender su recorrido hasta Europa. En el distrito C, el audio de un «discurso de extrema derecha» va acompañado de una serie de imágenes. En el Distrito D, los jugadores deben preparar un informe sobre un partido de extrema derecha antes de completar unos crucigramas.

En este juego inmersivo también participan ayudantes, que llevan trajes y máscaras antigás y cuyas voces están modificadas. La idea es estimular los cinco sentidos, a través de los diferentes retos, para que los participantes experimenten plenamente y tomen conciencia de los riesgos que corre la democracia en Europa.

Desde su presentación en junio de 2023, casi un millar de personas se han «desintoxicado», y también participan en el juego sindicatos de trabajadores, organizaciones y escuelas, tanto en Bélgica como en otros países. También han participado en el juego personas de Francia y Bulgaria, con el fin de recrearlo en otros lugares.

«Estamos orgullosos de haber desarrollado una herramienta educativa innovadora que aborda el tema de las ideas de extrema derecha de manera atractiva e interactiva», afirmó Malika Borbouse, de FEC Diversité. «Al fomentar el diálogo y la reflexión colectiva, nuestra iniciativa ha contribuido a reducir las tensiones y a promover una sociedad más inclusiva».

Ocultar

Conozca a algunos de los candidatos

El premio de este año logró reunir hasta cincuenta y ocho candidaturas de particulares, empresas privadas y organizaciones de la sociedad civil de muchos Estados miembros de la UE, reflejo de su amplia difusión geográfica. 

El premio de este año logró reunir hasta cincuenta y ocho candidaturas de particulares, empresas privadas y organizaciones de la sociedad civil de muchos Estados miembros de la UE, reflejo de su amplia difusión geográfica.

Las candidaturas engloban un amplio abanico de temas, que van desde la participación y la capacitación de la juventud hasta la cohesión y la inclusión sociales, pasando por la alfabetizaci&oacute...Leer

El premio de este año logró reunir hasta cincuenta y ocho candidaturas de particulares, empresas privadas y organizaciones de la sociedad civil de muchos Estados miembros de la UE, reflejo de su amplia difusión geográfica.

Las candidaturas engloban un amplio abanico de temas, que van desde la participación y la capacitación de la juventud hasta la cohesión y la inclusión sociales, pasando por la alfabetización mediática y la desinformación, los derechos humanos y la igualdad de género.

Muchas iniciativas abordan la raíz del problema de la polarización y contribuyen a su prevención.

Algunas iniciativas, como EUth Voices for Social Change («Voces de la juventud de la UE por el cambio social»), dirigida por la organización sin ánimo de lucro Youthmakers Hub de Grecia, tienen por objeto capacitar a las personas jóvenes para que promuevan cambios positivos en sus comunidades. Estos proyectos combaten el efecto pernicioso de la polarización y cimentan una cultura de tolerancia, al animar a la ciudadanía a participar en diálogos constructivos y a oponerse a los discursos divisorios, por ejemplo con talleres de alfabetización digital y de elaboración de pódcast.

Otros proyectos hacen frente a los discursos polarizadores y a la radicalización; buscan colmar las brechas culturales, étnicas y generacionales, superar las divisiones sociales, fomentar el mutuo entendimiento y la cooperación, proteger los derechos fundamentales e infundir cohesión social.

DEMDIS Digital Discussion, una iniciativa lanzada por DEMDIS en Eslovaquia, consiste en la creación de una nueva plataforma de software para albergar debates digitales desde la equidad, incluso sobre temas controvertidos. Los usuarios votan sobre las intervenciones y se distribuyen en grupos de opinión separados. Al buscar un terreno de entendimiento, el proyecto tiende puentes entre estos bandos polarizados.

La Guía de Derechos Humanos de The Baltic Human Rights Society es un ejemplo de la manera en que la sociedad civil puede colaborar para defender los derechos fundamentales. La Guía funciona como plataforma educativa en materia de derechos humanos y ofrece explicaciones multilingües sobre cómo pueden y deben funcionar los derechos humanos en situaciones específicas de la vida cotidiana.

Las candidaturas de este año incluyeron asimismo diversos planteamientos culturales y artísticos para abordar la polarización, como el Atlas geopolítico de la cultura y de los medios independientes en Europa de la asociación Arty Farty. Esta iniciativa hace hincapié en los temas prioritarios de una red de organizaciones culturales y de medios de comunicación independientes en toda Europa, por ejemplo la inclusión, la mitigación de las divisiones territoriales o la necesidad de luchar contra la desinformación. Son proyectos que demuestran que la cultura y los medios de comunicación pueden desempeñar un papel transformador en la despolarización de la sociedad.

 

Ocultar

Día de la ICE 2025: la iniciativa ciudadana europea debe desarrollar todo su potencial

La iniciativa ciudadana europea ha demostrado que es una herramienta eficaz para aumentar la participación de la ciudadanía en la vida política de la UE, pero debe reforzarse para evitar el riesgo de que las instituciones de la UE se alejen de los europeos de a pie.

La iniciativa ciudadana europea ha demostrado que es una herramienta eficaz para aumentar la participación de la ciudadanía en la vida política de la UE, pero debe reforzarse para evitar el riesgo de que las instituciones de la UE se alejen de los europeos de a pie.

La iniciativa ciudadana europea (ICE) es un mecanismo participativo de la UE diseñado para ref...Leer

La iniciativa ciudadana europea ha demostrado que es una herramienta eficaz para aumentar la participación de la ciudadanía en la vida política de la UE, pero debe reforzarse para evitar el riesgo de que las instituciones de la UE se alejen de los europeos de a pie.

La iniciativa ciudadana europea (ICE) es un mecanismo participativo de la UE diseñado para reforzar la democracia directa, al permitir que la ciudadanía de la UE —siempre que se alcance un millón de firmas y en la organización haya nacionales de al menos siete Estados miembros— pida a la Comisión Europea que proponga un acto legislativo en un ámbito en el que los Estados miembros hayan transferido competencias al nivel europeo.

Desde la puesta en marcha de las ICE en 2012, la Comisión Europea ha registrado 119 iniciativas, y sus organizadores han recogido unos veinte millones de firmas. Hasta la fecha, han prosperado once iniciativas y diez de ellas ya han recibido una respuesta de la Comisión.

El Día de la ICE, que celebra cada año el Comité Económico y Social Europeo (CESE), constituye un foro y una plataforma importantes en los que los organizadores de iniciativas ciudadanas europeas, registradas y futuras, y las partes interesadas pueden intercambiar información y experiencias y presentar sus iniciativas y actividades a la opinión pública.

Este año, el Día de la ICE se celebró en el marco de la Semana de la Sociedad Civil, el 18 de marzo.

«La UE debe dar nuevos pasos hacia la democracia participativa para complementar el modelo representativo que defiende. La iniciativa ciudadana europea es la primera herramienta de democracia participativa a nivel transnacional», afirmó Laurenţiu Plosceanu, vicepresidente de Comunicación del CESE.

Según la Defensora del Pueblo Europeo, Teresa Anjinho, la ICE es una herramienta poderosa, pero todavía no se ha aprovechado todo su potencial. «Tenemos que mejorar la comunicación sobre sus objetivos y funciones. Deben intensificarse las campañas de sensibilización para que la población esté plenamente informada de lo que se puede conseguir con una ICE y lo que no, y actúe en consecuencia. Para que la ICE siga siendo una herramienta significativa, se requiere transparencia, veracidad y comunicación. Si no lo logramos, tampoco podremos mantener la confianza en esta herramienta ni en el futuro de nuestra Unión», afirmó la Sra. Anjinho.

Durante el Día de la ICE, se presentaron nueve iniciativas, entre ellas las relativas al acceso al agua, la seguridad alimentaria, el aborto, los derechos LGBTQ+, la protección de los edificios existentes contra la demolición, la preservación del patrimonio de los videojuegos, un nuevo modelo para reducir las emisiones por medio de las cuotas aéreas y nuevas normas sanitarias para el uso médico de las sustancias psicodélicas.

En respuesta a los llamamientos para garantizar la financiación de las ICE, Adriana Mungiu, jefa del equipo ICE de la Secretaría General de la Comisión, instó a los activistas a no contar con la perspectiva, bastante lejana, de nuevos recursos presupuestarios dedicados únicamente a las ICE. En su lugar, les recomendó hacer un mayor uso de los fondos disponibles en el presupuesto actual de la UE, incluidos los capítulos sobre «participación ciudadana». (at)

Ocultar

Tres formas de acercar la ciudadanía a Europa a través de la iniciativa ciudadana europea (ICE)

Por Daniela Vancic

La ICE es verdaderamente única. En ningún lugar del mundo existe una herramienta semejante que permita a los ciudadanos y ciudadanas influir de forma directa en la legislación. Sin embargo, aún estamos a la espera de que se le otorgue el reconocimiento que merece desde hace tiempo, afirma Daniela Vancic, responsable principal de políticas y promoción europeas en Democracy International, quien compartió con nosotros tres ideas para lograr que la ICE tenga más impacto.

Por Daniela Vancic

La ICE es verdaderamente única. En ningún lugar del mundo existe una herramienta semejante que permita a los ciudadanos y ciudadanas influir de forma directa en la legislación. Sin embargo, aún estamos a la espera de que se le otorgue el reconocimiento que merece desde hace tiempo, afirma Daniela Vancic, responsable principal de políticas y promoción europeas en Democracy International, quien ...Leer

Por Daniela Vancic

La ICE es verdaderamente única. En ningún lugar del mundo existe una herramienta semejante que permita a los ciudadanos y ciudadanas influir de forma directa en la legislación. Sin embargo, aún estamos a la espera de que se le otorgue el reconocimiento que merece desde hace tiempo, afirma Daniela Vancic, responsable principal de políticas y promoción europeas en Democracy International, quien compartió con nosotros tres ideas para lograr que la ICE tenga más impacto.

La iniciativa ciudadana europea (ICE) es una de las herramientas democráticas más poderosas con las que cuenta la UE, solo por detrás de las elecciones al Parlamento Europeo. La implicación de más de veinte millones de ciudadanos y ciudadanas en sus trece años de existencia demuestra que es una plataforma participativa de primer orden. No obstante, pese a su potencial, rara vez recibe el reconocimiento que merece.

Me gustaría exponer las razones por la que la ICE es importante y tres ideas para lograr que tenga aún más impacto.

El papel de la ICE en un mundo polarizado

¿Qué hace que la ICE sea verdaderamente única? En ningún lugar del mundo existe una herramienta semejante. La ICE permite a los ciudadanos y ciudadanas influir de forma directa en la legislación si logran recabar para ello apoyos en al menos siete Estados miembros de la UE. En una época en que la polarización política va en aumento, actúa como puente vital entre la ciudadanía y los responsables políticos, fomenta la colaboración, crea conexiones e impulsa un cambio real.

La esencia de la ICE es inspirar a las personas para que participen en la elaboración de las políticas. Reúne a diversos grupos, estimula el debate público y proyecta voces en la escena europea. Por ejemplo, la iniciativa Mi voz, mi decisión, que recientemente consiguió reunir más de un millón de firmas, movilizó a toda una red de activistas, organizaciones y personalidades públicas (incluidas figuras internacionales como Barack Obama) y suscitó una conversación más amplia sobre valores fundamentales. Este tipo de movilización crea un valor duradero para la propia democracia, así como para la causa que se defienda.

Tomar decisiones a tiempo es fundamental

La ICE encierra un enorme potencial democrático, pero para liberarlo por completo es esencial que las instituciones europeas tomen decisiones a tiempo. Si bien algunas iniciativas, como la campaña «End the Cage Age» (Acabemos con las jaulas), han propiciado cambios positivos en las políticas de la UE, a menudo existe un retraso significativo entre el apoyo público a una ICE y su seguimiento legislativo, lo cual puede resultar frustrante tanto para la ciudadanía como para la sociedad civil, corriendo el riesgo de que dejen de creer en el proceso.

Para no perder el impulso, la UE debe considerar la posibilidad de acelerar la tramitación de las ICE que reciban un apoyo público abrumador. Si bien elaborar la legislación de la UE lleva tiempo, cuando una ICE cuenta con un respaldo claro y generalizado, debe recibir especial atención y cuidado. La ciudadanía debe poder ver cómo sus ideas se transforman rápidamente en acciones, lo que convierte a la ICE en un catalizador del cambio oportuno y en una herramienta influyente.

El papel de las organizaciones de la sociedad civil a la hora de impulsar la reforma europea

Las organizaciones de la sociedad civil siempre han ocupado un lugar central en la ICE, ya que han movilizado a la ciudadanía y sensibilizado sobre el potencial de la herramienta. Desde el principio, organizaciones como Democracy International han desempeñado un papel crucial a la hora de organizarla y respaldarla. No obstante, el papel de la sociedad civil no se detiene ahí.

Estas organizaciones deben seguir abogando por reformas que puedan reforzar la ICE como instrumento democrático. Por ejemplo, a través de las ICE debería ser posible que la ciudadanía presentara propuestas de reforma de los Tratados de la UE, una competencia que aún no está a su alcance pero que podría tener un profundo impacto en el futuro de Europa. Los debates sobre la reforma de los Tratados van evolucionando y se reconoce cada vez en mayor medida que la UE necesita un Tratado que esté a la altura para dar respuesta a los retos y oportunidades de nuestro tiempo; por ello, es más importante que nunca ampliar la ICE para que los ciudadanos y ciudadanas puedan sentarse en la mesa de negociaciones.

La ICE debe ser una fuente de inspiración para las políticas

Elevemos el nivel de ambición de la ICE. Una idea para movilizar todo su potencial es tener en cuenta incluso las ICE que no cumplan todos los requisitos formales. No todas las grandes ideas superarán el umbral de un millón de firmas, lo cual no significa que no merezca la pena examinarlas. Gestionar una ICE no es tarea fácil, sobre todo porque implica esfuerzos transnacionales, multilingües y multinacionales. Con todo, es posible que algunas de las mejores ideas no cuenten con los recursos necesarios para alcanzar el exigente listón que culmina en el éxito de una ICE.

Por ejemplo, la ICE Single Communication Tariff Act (Tarifa única de telefonía móvil) de 2012 no tuvo «éxito» si nos atenemos a la definición estándar de este término, pero consiguió inspirar la política de «en itinerancia como en casa», que entró en vigor cinco años después y beneficia a millones de europeos desplazados, que ahora pueden disfrutar de la itinerancia de datos sin tasas a través de las fronteras. Esto demuestra que incluso las ICE que no cumplen el objetivo del número de firmas pueden inducir cambios en las políticas. La UE debe estar abierta a considerar todas las ideas que impulsen sus ciudadanos y ciudadanas, incluso aquellas que no lleguen al umbral del millón de firmas, y a utilizarlas como fuente de inspiración para la futura legislación.

Principales conclusiones

La ICE es una herramienta increíblemente valiosa para reforzar la democracia en Europa, en especial en un momento en que los valores democráticos están amenazados en todo el mundo. Permite que los ciudadanos y ciudadanas presenten sus ideas en el ámbito de la UE, moviliza el apoyo del público y genera un impacto significativo. Ahora que la ICE está entrando en la «adolescencia», ha llegado el momento de reflexionar sobre cómo dar más vuelo a esta herramienta única y crear una conexión más sólida y directa entre la ciudadanía y las instituciones.

Con el apoyo continuo de la sociedad civil, la ICE puede contribuir a construir una Unión Europea más participativa y receptiva y, por ende, a consolidar su posición como líder mundial en democracia.

Daniela Vancic es la principal responsable de políticas y promoción europeas en Democracy International, organización desde la que lleva defendiendo la democracia participativa y directa desde 2017. Con más de una década de experiencia en procesos de participación ciudadana, es una reconocida experta sobre la iniciativa ciudadana europea. En 2022 coeditó el libro «Complementary Democracy: The Art of Deliberative Listening».

Ocultar

La iniciativa ciudadana europea (ICE) «Mi voz, mi decisión» reúne más de 1,2 millones de firmas en apoyo del derecho al aborto

La iniciativa ciudadana europea «Mi voz, mi decisión» aboga por el derecho a abortos seguros y accesibles para todas las mujeres en todos los Estados miembros de la UE. Puesta en marcha en abril de 2024 y coordinada por la organización eslovena 8th of March Institute, ha conseguido recabar más de un millón de firmas mucho antes del plazo límite. CESE Info conversó con las organizadoras sobre la urgencia de su campaña en el actual clima político, en un momento en que las mujeres están perdiendo cada vez más el control sobre sus derechos reproductivos.

La iniciativa ciudadana europea «Mi voz, mi decisión» aboga por el derecho a abortos seguros y accesibles para todas las mujeres en todos los países de la UE. Puesta en marcha en abril de 2024 y coordinada por la organización eslovena 8th of March Institute, ha conseguido recabar más de un millón de firmas mucho antes del plazo l&iacut...Leer

La iniciativa ciudadana europea «Mi voz, mi decisión» aboga por el derecho a abortos seguros y accesibles para todas las mujeres en todos los países de la UE. Puesta en marcha en abril de 2024 y coordinada por la organización eslovena 8th of March Institute, ha conseguido recabar más de un millón de firmas mucho antes del plazo límite. CESE Info conversó con las organizadoras sobre la urgencia de su campaña en el actual clima político, en un momento en el que las mujeres están perdiendo cada vez más el control sobre sus derechos reproductivos.

¿Qué les llevó a poner en marcha la iniciativa «Mi voz, mi decisión» y cuál es su objetivo final?

Hace casi tres años, cuando fue revocada la sentencia del caso Roe contra Wade en los Estados Unidos, empezamos a pensar en una campaña que protegiera el derecho al aborto en Europa. Las mujeres de los Estados Unidos perdieron su derecho constitucional de un día para otro y éramos conscientes de que también era necesario proteger el aborto en Europa. En Polonia hay mujeres que mueren en el hospital debido a la prohibición casi absoluta del aborto. Son las mujeres polacas las que han organizado las mayores protestas por el derecho al aborto en los últimos años. En Malta, las mujeres aún pueden ir a la cárcel si abortan. Este año, Giorgia Meloni ha dado permiso a los grupos antiaborto para protestar en el recinto de las clínicas de interrupción del embarazo y acosar a las mujeres que acuden allí para abortar. Más de veinte millones de mujeres en Europa no tienen acceso a la interrupción voluntaria del embarazo.

Por todas estas razones, emprendimos la campaña «Mi voz, mi decisión». Para elaborar nuestra propuesta, trabajamos con un equipo de abogados internacionales y construimos una sólida red con organizaciones de toda Europa.

Nuestro objetivo es proteger el derecho al aborto a nivel de la UE y mejorar el acceso a la interrupción voluntaria del embarazo de las mujeres que ahora tienen que desplazarse a otros países debido a la prohibición de practicar abortos en sus Estados miembros (como las mujeres de Malta y Polonia) o a una tasa elevada de objeción de conciencia (como se observa en Italia y Croacia); también el derecho de cualquier persona que en la actualidad no puede permitirse económicamente el aborto (en países como Alemania o Austria).

El clima político actual es precisamente la explicación de por qué nuestra campaña no puede esperar. Hemos de unirnos y demostrar que la mayoría de las personas defiende el derecho al aborto y se opone a las restricciones a la libertad reproductiva. Una gran parte de la ciudadanía europea apoya el derecho al aborto y hemos de mantenernos unidos para defenderlo.

¿Qué medidas concretas piden que adopte la Comisión Europea? ¿Cómo puede conseguirse el resultado que ustedes pretenden, teniendo en cuenta que la salud es competencia de los Estados miembros?

Proponemos que la Comisión Europea establezca un mecanismo financiero que funcione como un mecanismo de inclusión voluntaria para los Estados miembros y cubra el coste de los procedimientos de aborto. Funcionaría de forma similar a los programas de prevención y tratamiento del cáncer.

La idea es que cualquier persona que tenga que viajar a otro país para un aborto —en razón de la existencia de restricciones estrictas o de una elevada tasa de objeción de conciencia en su Estado miembro— no tenga que pagar el procedimiento de su propio bolsillo. En la actualidad, miles de mujeres se desplazan a otros países, donde a veces pagan miles de euros por interrumpir el embarazo, y no todo el mundo puede permitírselo.

Aunque el aborto no sea competencia de la Comisión Europea, sí lo son los programas financieros relacionados con la asistencia sanitaria, que es el argumento que nos ha permitido registrar nuestra ICE. 

¿Por qué optaron por hacerlo a través de una ICE? ¿En qué medida esperan que la Comisión dé una respuesta favorable?

Nuestra organización eslovena, el 8th of March Institute, que coordina la campaña «Mi voz, mi decisión», tiene una amplia experiencia en iniciativas ciudadanas nacionales, recogida de firmas y referendos. A través del mecanismo nacional de iniciativa ciudadana hemos logrado modificar con éxito quince leyes en Eslovenia y ganado dos referendos nacionales. Por ello, queríamos encontrar un instrumento similar de democracia directa a escala de la UE, y de esta manera llegamos a la ICE. Nuestro propósito era lograr un cambio directo que tuviera un impacto duradero en los derechos reproductivos de todas las personas en Europa, y por eso decidimos iniciar la recogida de firmas.

A lo largo de la campaña hemos obtenido el apoyo político de todos los grupos políticos de centro-izquierda del Parlamento Europeo, recibimos el respaldo de destacados políticos nacionales de muchos Estados miembros de la UE y hemos establecido buenas conexiones y relaciones con los comisarios europeos. Esperamos que escuchen al más de 1,2 millones de personas que respaldan nuestra iniciativa. 

¿Cómo consiguieron movilizar a personas de diferentes países de la UE para apoyar su iniciativa y colaborar en la recogida de firmas? ¿Qué canales utilizan para difundir la información?

Durante la campaña construimos una sólida red de más de 300 organizaciones y creamos una hermosa comunidad de voluntariado con más de 2 000 personas de toda Europa. Queríamos estar presentes en las calles de las ciudades y pueblos europeos, con nuestras voluntarias y voluntarios dispuestos a recoger firmas. Logramos establecernos con una fuerte presencia en línea en Instagram, aunque también hemos recurrido a diferentes canales como Facebook, TikTok, YouTube, Bluesky, X y otras plataformas de redes sociales.

Superaron el umbral del millón de firmas necesarias para que prospere una ICE un mes antes de la fecha límite para reunirlas. ¿Qué tipo de observaciones y apoyos, incluido el financiero, han recibido hasta la fecha?

Conseguimos alcanzar el millón de firmas en diciembre, tras una campaña de nueve meses, y cerramos la recogida con 1,2 millones de firmas antes del plazo límite.

Para recabar las firmas contamos con la ayuda de nuestra red y nuestra comunidad, pero también recurrimos a diferentes posibilidades de financiación a lo largo de la campaña para mantenerla activa. La iniciativa «Mi voz, mi decisión» ha ganado también el Premio de la Sociedad de Sociología de Eslovenia y está preseleccionada para el Premio SozialMarie. Obtuvimos asimismo el apoyo de todos los grupos políticos de centro-izquierda del Parlamento Europeo, y el sostén individual de varios diputados al PE, la vicepresidenta del Parlamento Europeo Nicolae Ștefănuță, la senadora francesa Melanie Vogel, la presidenta eslovena Nataša Pirc Musar y el primer ministro de Eslovenia Robert Golob. Muchos activistas y personas de diferentes países de la UE también apoyaron la campaña, por ejemplo Luisa Neubauer, de Alemania, y Alice Coffin, de Francia.

«Mi voz, mi decisión» es una iniciativa que está convirtiéndose en uno de los mayores movimientos feministas de Europa. En ella participan más de 300 organizaciones, innumerables seguidores y voluntarios convencidos de toda la UE que trabajan juntos para garantizar un aborto seguro y accesible en la Unión Europea. 

Ocultar

Para saber qué es una guerra hay que hablar con quienes la viven a diario

Tatiana Povalyaeva representó a Ucrania en la edición de este año de ¡Tu Europa, tu voz! (YEYS) acompañada de sus alumnos. Profesora en un centro de enseñanza secundaria de Járkiv, la última vez que dio clase en persona fue en febrero de 2022 y desde entonces enseña a sus alumnos en línea. Describe lo difícil que resulta ser docente en una ciudad que se encuentra a solo cuarenta kilómetros de la frontera rusa y sufre ataques incesantes desde el inicio de la guerra.

Tatiana Povalyaeva representó a Ucrania en la edición de este año de ¡Tu Europa, tu voz! (YEYS) acompañada de sus alumnos. Profesora en un centro de enseñanza secundaria de Járkiv, la última vez que dio clase en persona fue en febrero de 2022 y desde ent...Leer

Tatiana Povalyaeva representó a Ucrania en la edición de este año de ¡Tu Europa, tu voz! (YEYS) acompañada de sus alumnos. Profesora en un centro de enseñanza secundaria de Járkiv, la última vez que dio clase en persona fue en febrero de 2022 y desde entonces enseña a sus alumnos en línea. Describe lo difícil que resulta ser docente en una ciudad que se encuentra a solo cuarenta kilómetros de la frontera rusa y sufre ataques incesantes desde el inicio de la guerra.

Como docente, como profesora, ¿hasta qué punto ha repercutido la guerra de Ucrania en su capacidad para enseñar y en el sistema educativo en general?

Hoy día, casi todas las escuelas de Járkiv se han pasado al aprendizaje en línea porque no disponemos de suficientes refugios para garantizar la seguridad de nuestros alumnos en clases presenciales. Nos encontramos en esta tesitura desde hace tres años y la última vez que vi a mis alumnos en clase fue el 23 de febrero de 2022.  Muchos estudiantes han abandonado el país. No les quedaba más remedio. Ahora viven dispersos en muchos países europeos y, habiendo sido su profesora, me da muchísima pena: echo de menos a mis alumnos y sé que se enfrentan a muchas dificultades. A veces tienen que estudiar a la vez en escuelas europeas y ucranianas, lo cual supone una enorme carga sobre sus espaldas. Mientras tanto, los que seguimos en Ucrania vivimos en una situación de constante peligro. Nadie merece vivir así.

Enseñar y apoyar a los estudiantes en tiempos de guerra es un reto al que nunca nos habíamos enfrentado. Para mí, una de las mayores dificultades es la sensación de impotencia que me invade cuando no puedo ayudar a un alumno o alumna. Mis conocimientos y experiencia son a veces insuficientes para tratar los problemas de salud que causan la ansiedad, y sus secuelas. He observado cambios profundos en la personalidad de algunos alumnos que padecen de trastorno por estrés postraumático y para quienes es mucho más necesario un médico que un profesor. Duele cuando te das cuenta de que no puedes protegerlos de estas adversidades. Sin embargo, nos mantenemos a su lado, siempre dispuestos a prestarles nuestra ayuda y cuidar de ellos.

A mí misma también me resulta difícil mantenerme resiliente y seguir siendo un punto de referencia para mis alumnos, no solo respecto de las materias que enseño, sino también en otros ámbitos de la vida. Un profesor fuerte y resiliente tiene más que ofrecer a sus alumnos, pero la pregunta es: ¿cómo mantener esta fuerza? Los docentes que vivimos y trabajamos en plena guerra necesitamos tanto apoyo como los demás, porque apoyamos a niños y jóvenes que son nuestro futuro. Cuanto más energía positiva sienta un profesor, más capaz será de proporcionar apoyo y cuidar a sus alumnos.

¿Por qué considera importante animar a sus alumnos a interesarse por la política o la vida cívica, o a participar en actos internacionales como este?

Una de las tareas esenciales del profesor es animar a sus alumnos a ponerse manos a la obra. Alentarles a participar en la vida política es aún más importante porque la política tiene un impacto significativo en la vida de las personas. Brinda una valiosa oportunidad para concebir ideas y soluciones a muchos de los problemas a los que nos enfrentamos hoy en día.

Al participar en actos internacionales como «¡Tu Europa, tu voz!», los estudiantes pueden encontrar compañeros y colaboradores con los que compartir ideas, cooperar para encontrar las mejores soluciones e intercambiar valiosas experiencias. Sin duda, conocer a otros estudiantes les permite reflexionar sobre su apertura de miras, sus planes, sus objetivos y sus perspectivas de futuro, y también sobre qué tipo de crecimiento personal puede ser aún necesario para ellos.

Si pudiera dirigirse a otros docentes o centros de enseñanza, ¿qué les diría como profesora en Ucrania en este momento?

Tengo solo tres mensajes para mis colegas y sus alumnos. En primer lugar, si realmente quieren saber la verdad sobre la guerra, tienen que hablar con las personas que la están padeciendo.

En segundo lugar, hay que ser consciente de la importancia que reviste la unidad para poder ayudar a los demás y estar preparados para prevenir situaciones catastróficas. Además, es necesario reconocer la importancia de formar parte de una comunidad fuerte con valores morales, intereses y perspectivas de futuro comunes.

En tercer lugar, pienso que lo más importante es que estamos vivos. Seguimos viviendo, luchamos y obtenemos resultados. Crecemos como personas, esperamos que las cosas cambien para mejor y hacemos todo lo posible por demostrar que incluso en los momentos más difíciles hay esperanza y ganas de vivir. Respetamos a quienes dedican su vida a defender nuestra futura independencia y les ayudamos en todo lo que podemos. Estamos agradecidos a todas las personas que nos ayudan.

Los estudiantes ucranianos participan en numerosos actos y concursos, tanto nacionales como internacionales, e incluso en olimpiadas, donde obtienen grandes resultados y reconocimiento mundial. Al mismo tiempo, aprendemos a sobrevivir, desde el punto de vista físico, intelectual y emocional, en unas condiciones de vida muy difíciles, y esto formará parte de nuestra experiencia vital en el centro de Europa.

Tatiana Povalyaeva lleva casi veintiséis años enseñando inglés en el Liceo n.º 99 de Járkiv en Ucrania. Participó junto con sus alumnos en la edición de este año de «¡Tu Europa, tu voz!» (YEYS). 

Ocultar
Comité editorial

Ewa Haczyk-Plumley (editor-in-chief)
Laura Lui (ll)

Colaboraron en este número

Chrysanthi Kokkini (ck)
Claudia-Paige Watson Brown (cpwb)
Daniela Vincenti (dv)
Dimitra Panagiotou (dm)
Ewa Haczyk-Plumley (ehp)
Giorgia Battiato (gb)
Jasmin Kloetzing (jk)
Joanna Harnett (jh)
Katerina Serifi (ks)
Laura Lui (ll)
Leonard Mallett (lm)
Marco Pezzani (mp)
Margarita Gavanas (mg)
Margarida Reis (mr)
Millie Tsoumani (mt)
Pablo Ribera Paya (prp)
Samantha Falciatori (sf)
Parminder Shah (sp)
Thomas Kersten (tk)
Veronika Kadlecová (vk)

Coordinación

Agata Berdys (ab)
Giorgia Battiato (gb)

 

 

Dirección

European Economic and Social Committee
Jacques Delors Building,
99 Rue Belliard,
B-1040 Brussels, Belgium
Tel. (+32 2) 546.94.76
Email: [email protected]

EESC info is published nine times a year during EESC plenary sessions. EESC info is available in 24 languages
EESC info is not an official record of the EESC’s proceedings; for this, please refer to the Official Journal of the European Union or to the Committee’s other publications.
Reproduction permitted if EESC info is mentioned as the source and a link  is sent to the editor.
 

April 2025
4/25

Follow us

  • Facebook
  • Twitter
  • LinkedIn
  • Instagram
OSZAR »